Enclavada en el centro de Europa, hechizada en el tiempo y superviviente de las dos grandes guerras, Praga se desenvuelve lentamente al majestuoso compás de la música de Dvorák o de Smetana mientras despliega misteriosas historias y leyendas en lugares y rincones donde el tiempo parece haberse detenido. La singular capital de la República Checa promete toda una aventura llena de enigmas en calles, puentes, plazas y en su gran castillo, uno de los conjuntos arquitectónicos más espectaculares de Europa y del Mundo. Praga es una ciudad que esconde todo tipo de sorpresas. En cada rincón esconde un misterio, una leyenda que en muchas ocasiones sobrecoge o hechiza.
1.- La Plaza de la Ciudad Vieja: es uno de los lugares más agradables de la capital. Desde la Edad Media ha sido un centro de agregación social. Durante el siglo XI, las edificaciones fueron extendiéndose desde el Castillo hasta la orilla derecha del río Moldava. A finales de este siglo se menciona por primera vez la existencia de un mercado en la actual plaza de la Ciudad Vieja. A lo largo de los dos siglos siguientes Praga continuó creciendo y en el siglo XIII adquirió el título de ciudad. El ayuntamiento comenzó a funcionar a mediados del siglo XIV. Acogedora y antigua, la plaza está rodeada por interesantes callejuelas por las que resulta un auténtico placer pasear. La plaza está repleta de edificios de interés entre los que destacan la Iglesia de Nuestra Señora de Týn (Construida en el siglo XIV sobre una antigua iglesia románica, es una impresionante iglesia de estilo gótico tardío que cuenta con dos de las afiladas torres que dominan los cielos de Praga. Fundida entre las casas y estrechas callejuelas del centro de la ciudad, la Iglesia es el mayor símbolo del estilo gótico de Praga y un edificio con una importante historia. La iglesia cuenta con 52 metros de largo y 28 de ancho, así como sus impresionantes torres que superan los 80 metros de altura);
2.-Iglesia de San Nicolás: De estilo gótico tardío y barroco en el casco antiguo de la ciudad, fue construido entre 1732-1737 en el sitio de una iglesia gótica del siglo XIII que también fue dedicada a San Nicolás. Su imponente fachada blanca coronada por una cúpula de bronce es un punto de referencia obligado, debido a su ubicación en la esquina noroeste de la plaza más famosa de Praga. Pero no siempre ha sido tan visible: de hecho, originalmente la iglesia estaba oculta por un edificio demolido en 1902, la Krenn House, y por el ala neogótica del ayuntamiento, destruida en 1945 y que no se ha vuelto a reconstruir. Visitadla durante el día para admirar el interior ricamente decorado con estatuas, frescos y mármoles; volved después por la noche para quedaros impresionados por los complejos juego de luces o para dejaros llevar por la emoción de la música, ya que en ella se realizan habitualmente importantes conciertos de música clásica) y el Ayuntamiento de la Ciudad Vieja (uno de los edificios que más miradas atrae, gracias a que en él se encuentra el impresionante Reloj Astronómico de Praga. El edificio, utilizado como ayuntamiento hasta finales del siglo XVIII, destaca por su torre gótica de 60 metros de altura desde la que se puede contemplar el centro de la ciudad a vista de pájaro. En cuanto al reloj, es el más antiguo de su estilo en Europa y uno de los iconos de la capital checa desde hace más de seiscientos años y sobre este prodigio de la técnica medieval existen muchas leyendas aterradoras: si se para, lo mismo le sucede a todos los checos; si se rompe, vendrá un mal año con toda seguridad; si alguien lo menosprecia o lo trata sin respeto, será castigado. Según una historia escrita por Alois Jirásek, el mecanismo del famoso reloj astronómico fue construido por el maestro Hanuš - cuyo verdadero nombre era Jan Růže - y por su ayudante Jakub Čech en 1490. Los ediles cegaron al maestro Hanus para que no pudiera construirse una copia del reloj. Čech vengó a su maestro introduciendo una mano en el mecanismo, atascándolo e inutilizándolo, a costa de quedar a su vez manco.
3.- El Puente de Carlos: La historia explica que la primera piedra se colocó a las 5.31 horas del 9 de julio de 1357 por las supersticiones de Carlos IV, quien deseaba huir del mal fario del anterior puente, llamado de Judith, que había sucumbido en 1342. El rey pidió consejo a los numerólogos y astrólogos de su confianza y le indicaron que habría que esperar hasta la fecha y el momento adecuados para iniciar la construcción del puente. La fecha, ordenada en año-día-mes-hora, forma una secuencia capicúa de dígitos impares ascendentes y descendentes (1 3 5 7 9 7 5 3 1), es decir, que se lee en ambas direcciones igual y además todas las cifras son impares. Desde entonces este extraño y misterioso número se encuentra grabado en la Torre de la Ciudad Vieja, una de las obras más impresionantes del gótico secular en el mundo, construida por el taller de Petr Parléř en el famoso puente que, según se dice también, oculta algunos duendes bajo sus arcadas. A lo largo del puente encontraréis 30 estatuas situadas a ambos lados de éste, muchas de las cuales son copias ya que las originales se encuentran en el Museo Nacional de Praga y en Vyšehrad.
4.- El Castillo de Praga: Construido en el siglo IX, es el castillo más grande del mundo y el más importante de los monumentos de la República Checa. Alejado de la idea de castillo Medieval con aspecto fortificado, el Castillo de Praga está compuesto por un conjunto de hermosos palacios y edificios conectados por pequeñas y pintorescas callejuelas. Se puede decir que la historia de Praga comienza con la construcción del castillo, su situación estratégica pronto lo convirtió en el centro del territorio y constituyó la residencia de los Reyes de Bohemia desde su fundación por el príncipe Borivoj. En 1918 el Castillo de Praga se convirtió en la residencia del presidente de la República Checa y desde entonces el presidente tiene allí su despacho. El castillo cuenta con infinidad de edificios con un importante valor histórico y artístico, estos son algunos de los más destacados de la ciudad;
5.- Catedral de San Vito: Con una importante historia y un notable valor artístico, la Catedral es el símbolo de Praga y de toda la República Checa. Su construcción comenzó en 1344 por orden de Juan de Luxemburgo y, tras varias épocas y arquitectos diferentes, se terminó finalmente en los siglos XIX y XX. La Catedral de San Vito abrió sus puertas al público a finales de 1929. La catedral alberga la tumba de Wenceslao IV (El rey bueno), las Joyas de la Corona, y es el lugar de coronación de los reyes de Bohemia. Si queréis tener las mejores vistas de Praga y no os importa hacer un poco de ejercicio, podéis subir a las torres de la catedral por sus escarpadas escaleras de caracol. Desde la cima tendréis una visión magnífica del Puente de Carlos, Staré Město y Malá Strana. La altura de la torre más elevada son 99 metros, y las de las dos torres gemelas 80 metros;
6.- Antiguo Palacio Real: Creado en el siglo IX como un primitivo palacio de madera, el antiguo palacio sufrió importantes cambios hasta convertirse en el impresionante edificio que se conserva en la actualidad;
7.- Torre de la Pólvora: Construida en el siglo XV como parte de la fortificación del castillo, esta torre terminó convertida en el laboratorio de los alquimistas del rey Rodolfo II. Sorprendente como ninguno, el Castillo está unido a la historia de la ciudad, por lo que es imprescindible conocerlo a fondo para comprender Praga y enamorarse de ella :)
A Glass of Prague. Timelapse & Hyperlapse. Czech Republic from
Kirill Neiezhmakov on
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