LIFE AFTER PEOPLE: ¿Qué pasaría si los seres humanos desaparecieran de la Tierra?

En estas semanas de obligada reclusión en mi bunker para evitar al Coronavirus - pero obviamente no desconectado del mundo - tuve oportunidad de volver a apreciar un extraordinario documental que se adelanto a su tiempo al mostrarnos un planeta sin humanos, el cual es ‘recuperado’ por la naturaleza que reclama lo que siempre fue suyo, acabando con todo vestigio que recuerde el paso del hombre sobre la Tierra. Muchos lo catalogaron entonces como ciencia ficción creyendo que ello nunca sucedería, pero mira que se equivocaron. Precisamente cuando ahora las ciudades prácticamente se ven desiertas, libres al fin de los molestos humanos - encerrados en sus casas para no convertirse en victimas del Cononavirus, que esta dejando a su paso miles de muertos por el mundo - toda clase de animales han ‘invadido’ las urbes, tal como se ve en el citado documental realizado hace 12 años, por lo que perfectamente puede considerarse como profético. Su nombre es Life After People (La Tierra sin Humanos) una serie de diez capítulos transmitida originalmente por National Geographic en el 2008 y que posteriormente lo hizo History Channel, editado en dos horas, donde irónicamente no se mira hacia el pasado, sino hacia el futuro. El especial muestra la Tierra sin la especie humana luego de que nosotros nos hayamos esfumado sin explicación alguna, debido a que en el día 1 todo se ve como si hubiera humanos, sólo que no los hay. Es decir que no muestra secuelas de alguna catástrofe por la que nos hayamos extinguido. Los aviones entrarán en automático por algunas horas hasta que su combustible se agote. Alimentadas por combustibles fósiles, las centrales de energía, que están en gran medida automatizadas, se mantendrán en funcionamiento durante un par de horas hasta que sus suministros de combustible estén agotados. A las pocas horas, los sistemas eléctricos empiezan a fallar y las luces se apagan en todo el mundo; Luego de 24 horas, las centrales nucleares entrarán en modo seguro automáticamente debido a un menor consumo de energía. Los aerogeneradores seguirán funcionando, pero eventualmente se detendrán por falta de lubricación. Finalmente, a excepción de las zonas donde sus plantas de energía usan agua, es decir, represas hidroeléctricas, se pierde toda la electricidad en el planeta; A los 10 días, los alimentos se pudren en las tiendas, en los frigoríficos y las tierras con bastante abundancia perderán su abundancia. Aunque el deshielo de los congeladores de alimentos proporciona sustento temporal a mascotas, estas tendrían que salir de sus casas o de lo contrario, morirán de hambre. Los que logran escapar de las casas comenzarán a competir por los alimentos. Los perros y gatos que fueron criados por los seres humanos ahora ya no tienen lugar en este nuevo entorno competitivo y morirán por miles. Por su parte, las centrales nucleares de todo el mundo se sobrecalientan a debido a la falta de refrigeración que proporcionaba la energía eléctrica. Empiezan a estallar y contaminar las áreas aledañas. Miles de especies silvestres, principalmente herbívoros y roedores que viven cerca de la zona contaminada, perecen. Las mascotas y animales de zoológico que han podido escapar, comienzan la carrera por la supervivencia. Los animales de granja que viven en corrales mueren de hambre ya que nadie los alimenta; A los 6 meses, las formas de vida silvestre más grandes, que normalmente no se ve en las ciudades comienzan a habitar las zonas suburbanas. Comienzan a pastorear en los barrios. Las ratas y ratones han consumido los suministros de comida, las zonas urbanas están abandonadas y la naturaleza entra en las ciudades. Todos los cultivos se secan en pie y son material susceptible de incendios; Al primer año de nuestra desaparición, las plantas se empiezan a recuperar terreno en las ciudades. Pronto empiezan a brotar en las grietas de las calles, carreteras, aceras, o cualquier otra cosa hecha por el hombre. Ventanas de los edificios empiezan a caer y comienzan a cubrirse de verde; A los 5 años, las plantas han germinado y ahora abarcan grandes extensiones de las superficies en las zonas urbanas. Los viñedos, los pastos, los árboles invaden Nueva York, Londres y Washington D.C.. Las montañas de más de 4000 metros sobre el nivel del mar, y aquellas cercanas al ecuador de más de 5000 metros como el Kilimanjaro, vuelven a cubrirse de nieve casi todo el año, como siglos antes; Pasados 20 años, las ruinas de Prypiat en Ucrania, ciudad que fue abandonada en 1986, debido a la catástrofe de Chernobyl, muestra lo que les podría ocurrir a nuestras ciudades luego de la desaparición de la Humanidad. A pesar de los niveles de radiación, la población de animales ha aumentado considerablemente en las zonas de las que seres humanos se han ido. Las plantas han crecido en muchas estructuras, una vez utilizadas por los seres humanos. Los lobos vuelven a colocarse en la cúspide de la cadena alimenticia de Europa, Asia y Norteamérica. Los bisontes se han multiplicado, y únicamente los bovinos de pastoreo sobreviven; las vacas lecheras han desaparecido. Los pumas recobran su población y vuelven a habitar las zonas montañosas; A los 25 años, inundaciones en ciudades como Londres y Ámsterdam, que se encuentran actualmente protegidos por la ingeniería humana, ahora sin humanos para manejarlas, se llenan de agua. Las ventanas en los rascacielos comienzan a resquebrajarse debido al ciclo de congelación y descongelación que provoca la descomposición de los selladores de las ventanas. Esto a su vez las rompe. El lugar donde se encuentran las grandes ciudades ha vuelto a ser frío; Se cumplen 40 años y en ese momento, muchas casas con estructura de madera están quemadas, podridas, o han sido en gran parte consumidas por las plantas. Los árboles que crecen cerca de las estructuras de mampostería y ladrillo las rompen; A los 50 años, las grandes estructuras de acero, como el puente de Brooklyn, están empezando a mostrar signos de un próximo derrumbe por la falta de mantenimiento. La pintura que normalmente protege estas estructuras se desgasta, exponiendo el acero a los elementos, deviniendo la corrosión; Ya son 75 años y muchos de los miles de millones de automóviles en la Tierra se reducen a sólo un montón de metal oxidado; Ya son 100 años que dejamos el mundo y los grandes puentes como el Golden Gate de San Francisco y el puente de Brooklyn de Nueva York se derrumban debido a la corrosión de sus cables; Tras 150 años, el metro en muchas ciudades comenzará a colapsar debido a los túneles inundados derrumbando al mismo tiempo las calles de arriba. Muchos de los grandes edificios están completamente colonizados por plantas y animales silvestres, mientras los mares y océanos terminan de repoblarse; A 200 años de nuestra extinción, grandes estructuras, como el Empire State Building en Nueva York, la Torre Willis en Chicago, la Space Needle en Seattle, y la Torre Eiffel en París se derrumban por la corrosión. Lo mismo sucede con la aguja espacial de Seattle. El Empire State se ha inclinado, la gravedad empuja el edificio contra su base, derribándolo al mismo tiempo, Nueva York pierde su edificio más famoso. Desgastada y debilitada, la torre Willis, en el tiempo de los humanos el rascacielos más alto de los EE.UU. se desmorona estruendosamente; 500 años han pasado y las estructuras hechas con cemento se derrumban (al igual que las estructuras sólidas) debido a que sus armaduras de acero se amplían a tres veces su tamaño original y destruyen el cemento; Llegamos a los 1,000 años y la mayoría de las ciudades modernas están destruidas y cubiertas por plantas, Manhattan se parece mucho a como era antes de los asentamientos humanos, los antiguos arroyos regresan a su cauce original. Habría pocas pruebas de que una civilización humana existió en la Tierra. A los 10,000 años prácticamente el legado de la civilización humana ha desaparecido, tanto en la Tierra como fuera de ella. Las mayores y más resistentes grandes estructuras, como la Gran Muralla China podrían sobrevivir por lo menos unos 100.000 años. La Gran Pirámide de Guiza fue la última de las siete maravillas del mundo en caer, ella y la esfinge duraron lo suficiente como para ser tragadas y absorbidas por las arenas del desierto. La naturaleza da un golpe final a la arquitectura humana: la Presa Hoover, hecha para ser tan dura como las paredes del cañón, se va desmoronando, haciendo que el agua contenida en el lago Mead se derrame por el cañón al mismo tiempo recuperando el nivel del río Colorado. Las últimas palabras muestran que si toda la vida de la tierra se condensara en 24 horas, los últimos 10.000 años de la tierra serían una fracción de segundo, argumentando al mismo tiempo, que hubo vida antes de los humanos y la habrá luego de su desaparición; Pero eso no es todo, ya que pasados 2.000.000 de años de nuestra desaparición (la mayor distancia, hablando de tiempo, que recorre el programa) un satélite que orbitaba Saturno, luego de que sus sistemas fallan cae hacia su satélite Titán, y las bacterias que se encontraban dentro del aparato comienzan a reproducirse en el, ya que, según se cree, es el único lugar (además de la Tierra) donde se encuentra agua en estado líquido dentro del sistema solar. Entonces, mientras se muestran los créditos finales de la serie, se refleja cómo crecen las plantas y se desarrolla la vida en ese lugar, repitiéndose el ciclo en esta ocasión fuera del que una vez fue nuestro planeta. No cabe duda que se trata de un inquietante viaje hacia el futuro, que quien sabe, ya ha comenzado :(