BESTIAS SEDIENTAS DE SANGRE: EE.UU. y la OTAN son un peligro para la humanidad

Llega el 2015 con oscuros nubarrones en el horizonte, debido a las intenciones criminales de los EE.UU. y la OTAN de agudizar aun más sus ya deterioradas relaciones con Rusia, lo cual podría desembocar en una temida conflagración nuclear que arrase con la humanidad. “Precisamente eso es lo que buscan Washington, Bruselas y Londres, tratando de presentar a Rusia como el agresor en Ucrania, cuando es todo lo contrario” escribió este domingo el reconocido periodista Peter Hitchens – ganador del premio Orwell - en The Mail on Sunday. A veces se tiene la sensación, escribe, de que muchos europeos vivieran en el mundo de 'El Señor de los Anillos'. "Nosotros nos consideramos como los valientes que luchan por Ucrania contra las fuerzas oscuras. Pero esta interpretación es una tontería. Putin no es el malo de la película, como nos quieren hacer creer. Nosotros somos las bestias sedientas de sangre", opina Hitchens. A su juicio, Occidente perseguía inicialmente en Ucrania intereses puramente “comerciales”: 48 millones de mano de obra barata, el libre acceso al Mar Negro – considerado durante mucho tiempo como un coto cerrado por Rusia - así como tener a su disposición sus reservas de carbón y cereales. Para empezar, explica el periodista, la UE había gastado cientos de millones de euros para “apoyar” a la sociedad civil y a las organizaciones sin fines de lucro. Pero luego, rompiendo todas las reglas de la diplomacia, la OTAN - quien estuvo detrás de esos planes desde el primer momento - dejo en claro que quería el control absoluto del país para utilizarlo como carne de cañón en su guerra contra Rusia, para lo cual decidieron derrocar al gobierno democrático pro- ruso del señor Víctor Yanukovich, cuando este se negó desde un primer momento a sus infames planes. Es así como iniciaron una agresiva campaña de desinformación y guerra sucia contra su gobierno, enviando a agentes de la CIA para ponerse al frente de los manifestantes, quienes exigían la firma del “Acuerdo de Asociación” entre la UE y Ucrania, que en realidad era una virtual rendición de país para ponerlo bajo la “protección “ de la OTAN. Ante la firme rechazo del señor Yanukovich a esa burda maniobra, las manifestaciones digitadas por la CIA degeneraron en una serie de violentas protestas que provocaron su caída, siendo reemplazado por traidores colaboracionistas que hacen todo lo indecible para poner a Ucrania dentro de la orbita de la OTAN. Pero no contaron con la jugada maestra del Presidente ruso Vladimir Putin, quien posibilito el retorno de Crimea a Rusia (“regalada” ilegalmente por el dictador comunista Nikita Jruchov a Ucrania en 1954) en un acto libre y soberano de sus habitantes, quienes apoyaron tal iniciativa en un referéndum con mas del 93% de aceptación, algo que irrito profundamente a la camarilla fascista de Kiev y a la OTAN al ver desbaratados sus planes de apoderarse del Mar Negro. Pero eso no fue todo, ya que inmediatamente un espontáneo levantamiento de las minorías rusas en el Este de Ucrania quiso seguir el ejemplo de Crimea, lo cual desemboco en una sangrienta guerra civil que hoy arrasa el país y dio al traste con los planes iniciales de la OTAN de llegar hasta Siberia y hacerse con las inmensas reservas de gas y petróleo que existen allí. El odio que los fascistas tienen a Rusia por este motivo ha llegado a tal extremo que EE.UU. en coordinación con Arabia Saudita - una corrupta petromonarquia traidora al Islam al estar aliado con los sionistas – originaron un misterioso derrumbe de los precios mundiales del petróleo y la subsiguiente caída del rublo, lo que origino gran alegría en Washington, Bruselas y Londres. Basta ver las portadas que en estos días presentan The Wall Street Journal. The Economist y The Financial Times (que ilustra nuestra nota) para darnos cuenta de la propaganda negra sobre el supuesto “desastre” de la economía rusa propalada por quienes desde su comodidad bursátil no se cansan de incitar a una guerra de Estados Unidos y la OTAN contra Rusia, creyendo ilusamente que así podrán contenerla, pero están equivocados completamente. Ya el Presidente ruso Vladimir Putin declaro el último fin de semana que su país jamás será doblegado por las fuerzas de la OTAN y que se encuentra listo para responder a tales amenazas. Y es que la historia lo demuestra, con Rusia no se juega. Peter Hitchens opina que la presión sobre Rusia, en particular y la reticencia de Arabia Saudita a bajar las cuotas de producción de petróleo sucede debido al firme apoyo de Moscú al presidente sirio, Bashar al Assad, que representa "el blanco" de las petromarquias del Golfo, así como de Washington y de sus aliados europeos. “Nadie duda de que la Rusia de Putin ha sido un gran obstáculo para los deseos de esos países de destruir el gobierno de Al Assad en Siria, y sustituirlo por otro conformado por gobernantes títeres que pondrían a su país bajo control de Washington, permitiendo usarlo como base para su anhelado y cada vez mas lejano ataque a Irán, su verdadero objetivo” escribe Hitchens. “Pero, ¿tenemos alguna idea de lo que estamos haciendo? Los rusos comunes y corrientes han soportado horrores inimaginables como la mayoría de nosotros, incluyendo un colapso de su moneda en 1998 que arruinó a millones. Si Washington cree que es adecuado “castigar” al pueblo ruso por ser patriota y apoyar incondicionalmente a su gobierno, no puedo imaginar nada más irresponsable. Fue la destrucción del marco alemán en 1922 - ocasionada por la mafia judía que controla la banca - y la aniquilación de la clase media, que condujo al ascenso al poder de Adolfo Hitler. Es estúpido - por decir lo menos – que en Occidente hay quienes insistan en comparar a Putin con Hitler. Yo les advierto que, si tenemos éxito en provocar su caída, nos encontraremos con un Hitler ruso de verdad y ahí si lo vamos a lamentar, ya que con el formidable arsenal nuclear que posee, ocasionaría una guerra nunca antes vista en Europa” puntualiza la nota. No cabe duda alguna de que si las desbocadas ambiciones de EE.UU. y la OTAN no son frenadas a tiempo, ocasionara un conflicto armado de gravísimas consecuencias no solo para Europa, sino también para el resto del mundo. Si esos dementes guerra quieren, guerra tendrán y se llevaran una amarga sorpresa como Hitler y Napoleón... Rusia no se rinde jamás :)