Se trata de una cámara bridge de alta gama que cuenta con un sensor CMOS de 20,4 millones de puntos, pantalla LCD basculante de 3” con resolución de 921.000 puntos y permite la grabación de video Full HD con una frecuencia de 24p. Como su antecesora, la HX300, incorpora un objetivo zoom óptico de 50 aumentos equivalente a un 24-1.200 mm con luminosidad f2.8-6.3 –firmado nada menos que por Zeiss– que permite tomas realmente nítidas desde largas distancias. Sin embargo, este modelo nos permite ir aún más allá gracias al sistema Clear View, con el que podemos llegar hasta los 100 aumentos. Además, con el sistema Steady Shot se consigue una estabilidad relativamente buena, teniendo en cuenta la longitud del alcance. Cabe destacar también su sistema de enfoque automático con bloqueo, que permite enfocar objetos en movimiento de forma rápida y precisa. Eso sí, si queremos grabar vídeo con estas longitudes focales equivalentes el trípode resultará imprescindible. Otra de las novedades con las que cuenta es el procesador Bionz X, incluido desde hace tiempo en las cámaras de la gama RX y Alpha de Sony y caracterizado por su velocidad y reducción de ruido. También incorpora un visor electrónico de 201.000 puntos, con buena tasa de refresco y de cobertura completa, que resulta muy útil a la hora de previsualizar y controlar la toma con todos los preajustes establecidos. En cuanto a conectividad también encontramos diferencias respecto a sus predecesoras. La HX400V cuenta con Wi-Fi y tecnología NFC, además de la aplicación PlayMemories. Con esto conseguiremos transferir imágenes y controlar la cámara desde cualquier Smartphone de una manera rápida y sencilla. La Sony HX400V incorpora el conocido esquema de modos "PASM" y múltiples modos automáticos © Albedo Media, S.L. El único inconveniente a destacar (además, e igual que en sus predecesoras, de la ausencia de formato RAW) después de probarla durante varios días, es la dificultad del manejo de los controles manuales. Si bien ajustar la abertura de diafragma y el tiempo de obturación es realmente sencillo mediante el dial de control, moverse por los menús y ajustar parámetros básicos como la sensibilidad ISO o el ajuste de blancos puede resultar un tanto desesperante si se quiere realizar alguna captura con cierta urgencia. Esto puede suponer una pega para los usuarios que no quieran limitarse a los modos automáticos y quieran dar el paso hacia una fotografía más creativa. En conclusión podemos decir que la Sony HX400V es una cámara ligera y versátil, compacta pero capaz de dar resultados a la altura de una réflex e incluso mejores. Gracias a su potente zoom y su rápido enfoque, resulta muy recomendable para aficionados a la fotografía de naturaleza y fauna, ya que podrán tomar capturas y video desde puntos alejados con un equipo sencillo y manejable. Ya disponible a solo 480 euros, un precio muy tentador.