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miércoles, 2 de julio de 2014

EGIPTO: Un retorno al pasado

Hace un año, cientos de miles de personas salieron a las calles de Egipto para exigir la caída del régimen islamista, acusado de autoritarismo. El golpe de Estado militar que sucedió a las masivas protestas, y que derrocó a los Hermanos Musulmanes y al presidente Mohamed Mursi - el primer civil elegido democráticamente en la historia egipcia -  prometió hacer valer «la voluntad popular» y enderezar el rumbo de una transición tormentosa y atribulada. Sin embargo, un año después, la democracia  esta más lejos que nunca, el país sigue profundamente dividido y se ha experimentado un retroceso notable en las libertades individuales, sociales y políticas. La confianza que muchos egipcios pusieron en el entonces golpista jefe del Ejército Abdel Fattah Al Sisi,  se ha desvanecido y los desencantados recuerdan que la semilla de la conciencia social que plantó la revolución del 2011 sigue viva, y ningún gobernante podrá volver a ser inmune a ella. «El 30 de junio de 2013 muchos egipcios fueron a las calles esperando no solo acabar con el régimen de los Hermanos Musulmanes sino también para consolidar los derechos que se adquirieron en la revolución que derroco a Hosni Mubarak. Ahora vemos que estos derechos no existen», reconoce el politólogo Mustafa Kemal el Sayed. ¿En qué ha cambiado Egipto este último año? ¿Qué se ha perdido o ganado por el camino? En apariencia, la “estabilidad” ha regresado a las calles del país, una tensa calma muy ansiada por gran parte de los egipcios, pero que se ha conseguido a base de mano dura y una sangrienta represión. La ley de manifestaciones aprobada a finales de 2013 ha puesto fin a tres años de protestas y enfrentamientos violentos casi diarios. «Hoy vemos que los jóvenes que iniciaron la revolución están en prisión y los simpatizantes del régimen de Hosni Mubarak están de vuelta en los medios de comunicación y en la vida política, aunque aseguren que no son miembros del antiguo partido», señala El Sayed. El poder de la contrarrevolución ha llegado hasta tal punto de que el alzamiento de los egipcios en el 2011 que derrocó a Mubarak «se está describiendo en algunos medios como una conspiración extranjera instigada por Estados Unidos que habría llevado al deterioro de la situación económica y de seguridad en Egipto», añade el analista. Las libertades personales, la libertad de expresión, de reunión pacífica o de asociación han sufrido un retroceso en Egipto, donde la justicia y la injusticia se aplican con arbitrariedad, denuncian observadores y defensores de derechos humanos como Amnistía Internacional. Ejemplos en el último año no faltan. Desde enero, un juez ha recomendado la pena de muerte para más de 1.200 personas en procesos que han durado apenas un par de días y en los que la defensa no ha podido presentar pruebas o ver tan siquiera a los acusados. Periodistas de Al Jazzira han sido condenados a penas de entre 7 y 10 años de cárcel en un juicio en el que no se ha presentado ni una sola prueba sólida contra ellos. La salvaje represión de los golpistas se ha cebado con Los Hermanos Musulmanes, que fue declarada grupo "terrorista" y cuyo guía supremo, Mohamed Badie, ha sido condenado a muerte y sus principales líderes aguardan juicio en la cárcel, lo mismo que el propio Mohamed Mursi. Se calcula que unos 2.000 simpatizantes de la hermandad han muerto en el último año, sobre todo en los primeros dos meses tras el golpe de Estado, y más de 40 000 han sido encarcelados. De la hoja de ruta impuesta por los militares el 3 de julio del año pasado, Egipto ha consumado ya dos de sus puntos: ha aprobado una “nueva” Constitución y ha elegido a un nuevo “presidente”. Las elecciones legislativas serán el próximo paso. El borrador de la nueva ley que regulará esos comicios, sin embargo, no augura una gran representatividad, advierte Hassan Nafaa, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de El Cairo. La norma asigna un 80 por ciento de los escaños a los candidatos independientes y el resto a los partidos, lo que «conducirá al debilitamiento de los partidos políticos que ya existen», abriendo la puerta a que un parlamento débil sea manipulado por un poder ejecutivo potente, con un dictador como Abdel  Fattah Al Sisi quien pretende eternizarse en el poder contando para ello con la “bendición” de Washington quien lo ve como un estrecho “aliado” en la conflictiva región, lo cual se impone a cualquier otra consideración, incluida la del respeto a los más elementales derechos humanos. Occidente, sin embargo, debe reconsiderar su complacencia hacia este dictador quien empuña el timón de un país al borde de la bancarrota, profundamente dividido y con una insurgencia incipiente. La estabilidad de la nación más poblada e influyente del mundo árabe no llegará de la mano de una brutal represión política con miles de muertos y encarcelados, sino de un sistema legal digno de ese nombre y de una efectiva vuelta a la democracia y no a la farsa que Al Sisi y su camarilla golpista pretenden imponer :(  

SONY BRAVIA X85: Televisores 4K de entrada con tamaños de 49, 55 y 65 pulgadas

Los televisores Sony Bravia X85 son los equipos 4K de entrada de la compañía japonesa. Se trata de modelos con un tamaño de 49 pulgadas, 55 pulgadas y 65 pulgadas con un nivel de detalle cuatro veces más potente que la resolución Full HD. Estos equipos integran un potente procesador de imagen para poder escalar los contenidos que tengan una menor calidad y aprovechan la viveza de los colores que se consiguen a través de la pantalla de tipo Triluminos. Además, también podremos disfrutar de las últimas novedades en materia de Smart TV de Sony y de un novedoso mando que utiliza un panel táctil para acceder a distintas funciones con apenas un movimiento del dedo. Te contamos todos los detalles. La resolución 4K está llamada a convertirse en un estándar en apenas unos años. Los fabricantes están apostando muy fuerte por esta resolución, que multiplica por cuatro la definición que tienes los televisores Full HD, y que nos permite crear una verdadera ventana al mundo real por el detalle que alcanzan las imágenes. Los televisores Sony Bravia X85 están disponibles en formatos de 49 pulgadas, 55 pulgadas y 65 pulgadas. Además de la resolución 4K, estos equipos incorporan una pantalla Triluminos. Esta tecnología mejora considerablemente la reproducción de los colores, sobre todo en aquellas escenas en las que destaquen los colores básicos, como por ejemplo el verde en las escenas de la naturaleza. Gracias a esta tecnología, podremos conseguir colores más vivos y profundos. Por otra parte, estos televisores también incorporan el procesador de imagen X-Reality Pro para mejorar la calidad de la imagen y eliminar el ruido de las escenas con una calidad inferior. En el campo del diseño contamos con unas formas muy estilizadas y finas, pero lejos del glamour de modelos de alta gama como los Sony Bravia X9. Uno de los cambios más notorios a nivel de diseño respecto a los equipos del año anterior es el cambio de la peana en forma de anillo por dos peanas laterales para favorecer el agarre y reducir la profundidad. Otro de los aspectos que hay que destacar es un buen tratamiento del sonido gracias a dos altavoces con una potencia total de 20W y la buena factura de Sony en el campo del audio. Además, los usuarios también pueden introducir un altavoz inalámbrico opcional para poder mejorar la experiencia audiovisual. Como no podía ser de otra forma, estamos ante televisores inteligentes con varias funcionalidades avanzadas. Uno de los puntos que más nos han gustado es el nuevo mando táctil (que se une al mando tradicional de Sony). Con este complemento podemos controlar varias funciones del televisor con apenas un movimiento del dedo. Por otra parte, la compañía ha mejorado la interacción social de los televisores con la capacidad de enviar una invitación directa a uno de nuestros contactos que tenga una tele de Sony para ver un mismo programa de la tele y realizar una videollamada por medio de Skype. Por último, cuando estemos viendo un programa o una película podremos abrir una franja inferior en la tele con un flujo bastante atractivo de los tweets relacionados con el contenido :)

FERRARI F12 TRS: La máxima expresión de la exclusividad

Ferrari ha aprovechado la 'Cavalcade 2014', un evento anual en el que han ‘desfilado’ 90 coches de clientes selectos de la marca, para mostrar el F12 TRS, el último one-off (pieza única) creada por el equipo de diseño de Flavio Manzoni a requerimiento de un cliente. El F12 TRS es un derivado del F12 Berlinetta con un espíritu aún más deportivo. Su estética, tipo barchetta, se inspira en el 250 Testa Rossa de 1957 y destaca por el parabrisas envolvente que parece formar una pieza única con los cristales laterales, el llamativo final del capó con una ‘ventana’ que deja ver las culatas del V12 que se esconde bajo él o el splitter inferior del paragolpes en fibra de carbono. La trasera, de la que Ferrari no ha aportado ninguna imagen, es una evolución de la controvertida estética en forma de T del F12 aderezada con las típicas jorobas de estas carrocerías abiertas que comunican la zona de los reposacabezas con el final de la zaga .El interior se ha planteado de forma más radical que en el F12, eliminando todos los elementos que no intervengan directamente o mermen la parte prestacional del coche (como los mandos de los elevalunas, la guantera, el equipo de audio, las salidas de aire centrales…). Además, los materiales del interior (cuero, alcántara y fibra de carbono combinados con piezas en el mismo color rojo Corsa de la carrocería) son más técnicos y robustos, y presentan mayor resistencia al desgaste. Aunque su planteamiento estético es más radical, el F12 TRS es prestacionalmente equivalente al Berlinetta del que deriva, con un motor V12 de 6.2 litros bajo el capó con 740 caballos de potencia que impulsan al coche desde parado a 100 km/h en apenas 3,1 y segundos y a 200 km/h en unos impresionantes 8,1 segundos. Valorado en 3,1 millones de euros, es posiblemente, el Ferrari más caro de la Historia (cuesta el doble que el Ferrari LaFerrari) Sin duda, un auténtico Ferrari :)  
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