Desde su reunificación con Rusia por decisión soberana de sus habitantes, quienes en un referéndum de marzo del 2014 acordaron mayoritariamente con el mas del 96% de votos a favor, regresar a la Madre Patria del cual había sido separados injusta y arbitrariamente por el dictador comunista soviético (de origen ucraniano) Nikita Jrushchov y ‘regalado’ a Kiev en 1954, Crimea ha sido objeto de la codicia de los EE.UU. y sus lacayos de la OTAN, quienes tras derrocar en el 2014 al presidente constitucional Viktor Yanukóvich en un golpe de Estado preparado por la CIA y reemplazarlo por el traidor colaboracionista Petró Poroshenko, con el objetivo de utilizar a Ucrania como zona de paso para llegar a Siberia y apoderarse de sus inmensas reservas de gas y petróleo. Pero fracasaron en su intento gracias a la intervención rusa que no solo salvo del genocidio a la comunidad rusoparlante del este de Ucrania por parte de la camarilla golpista de Kiev, sino que también desbarataron todos los planes estadounidenses para asentarse en el territorio. Sin embargo, sus sueños de dominación siguen intactos y tal como escribe el columnista ruso Serguéi Íschenko, ante la imposibilidad de trasladar permanentemente la Sexta Flota al Mar Negro, debido a la existencia de un tratado que lo prohíbe, Washington ha decidido rearmar a sus ‘aliados’ en la zona, para que sean ellos quienes ‘enfrenten’ a Rusia en un hipotético conflicto: “El medio estadounidense Defense News ha publicado recientemente que, entre 2018 y 2024, el Ministerio de Defensa de Rumania planea adquirir en el extranjero cuatro corbetas por valor de 1.930 millones de dólares. Las autoridades búlgaras, por su parte, anunciaron los planes de compra de dos corbetas por un monto total de 503 millones de dólares. Los citados gastos pueden resultar insostenibles para ambos países, tomando en consideración su presupuesto, Por ejemplo, el presupuesto militar de Rumania en 2017 ascendió únicamente a 3.600 millones de euros. Para asignar una suma tan grande a la partida de defensa, las autoridades rumanas tienen que realizar tijeretazos considerables en otros ámbitos, opina Íschenko. En este contexto, es interesante tratar de entender la causa por la que en Bucarest han decidido implementar nuevos recortes. "Cuando ambos países, que anteriormente adquirían sus buques exclusivamente en los mercados de segunda mano, toman la decisión prácticamente simultánea de aumentar sus capacidades de combate en el mar Negro, es lógico suponer que la necesidad de este paso fue recomendada por alguien. Y este alguien es tan potente que mejor no contradecirlo", prosigue Íschenko. Para encontrar a este 'consejero oculto', es necesario entender sus motivos. A este respecto, el autor del artículo propone recordar la iniciativa relacionada con la creación por parte de los países de la OTAN de una flotilla unida en el mar Negro. Por primera vez, esta idea resonó en enero del 2016, precisamente en Bucarest, recuerda el columnista. En aquel entonces, numerosos expertos en materia militar coincidieron en que las conversaciones acerca de una flotilla unida habían sido utilizadas para presionar a Moscú y, en la práctica, habían resultado poco viables. Como sabéis, la Convención de Montreux sobre el paso por los Estrechos limita considerablemente la presencia de flotillas de países que no tienen salida al Mar Negro, por lo que los EE.UU. no pueden tener una base permanente desde el cual poder amenazar a Rusia. Actualmente, las fragatas Regele Ferdinand (F221) y Regina Maria (F222) son los principales elementos de combate de la Armada de Rumania. Dichas naves no representan ninguna amenaza a la Flota del Mar Negro de Rusia, ya que son exfragatas británicas que fueron retiradas del servicio en el Reino Unido porque estaban obsoletas. Por su parte, la Armada de Bulgaria no luce un gran aspecto hoy en día. Basta con mencionar su fragata BGS Verni (una nave de origen belga que anteriormente tenía el nombre Wielingen y que fue botada en marzo de 1976), por lo que hoy, es chatarra. Entonces, ¿qué les queda a los aliados de la OTAN para poder cumplir su plan relacionado con la creación de una flotilla unida? ¿La flota de Turquía? "Sí bien la flota turca es numerosa y está modernizada, los vaivenes políticos del dictador Recep Tayyip Erdogan en su guerra personal contra la Unión Europea - que ha cerrado la puerta definitivamente a Turquía a una posible adhesión de ese país asiático al grupo, lo cual ha enfurecido a Ankara y además su rechazo palpable a la creación de una Kurdistán ‘independiente’ que en realidad seria otro enclave estadounidense mas, como lo es Kosovo en Serbia - no permiten contar con su lealtad a sus aliados de la OTAN ante un conflicto hipotético con Rusia", escribe Íschenko. El periodista considera que los enemigos de Rusia están tratando de trazar un plan a largo plazo. Tan largo que sea suficiente para reorganizar completamente la Armada de países dispuestos a todo, como lo son Bulgaria y Rumania. "Supongo que así nació su decisión simultanea de comprar varias corbetas. Posteriormente, estas naves podrán convertirse precisamente en la base para la flotilla unida (de la OTAN) en el mar Negro. Durante las crisis, los destructores de la Sexta Flota de Estados Unidos apoyarán a estas naves" aseveró. Además, Íschenko no excluye la posibilidad de que la base naval que ahora están levantando los militares estadounidenses en la localidad ucraniana de Ochákovo sirva para el despliegue operativo de barcos cerca de la península de Crimea. Aunque no se desglosan datos sobre los buques que Sofía y Bucarest quieren adquirir, el autor sugiere que se trata de las corbetas francesas de clase Gowind. Durante su último viaje a Bulgaria, el presidente galo, Emmanuel Macron, ‘alabó’ precisamente estas naves. Francia utiliza tecnología furtiva en la producción de corbetas de la clase Gowind. El desplazamiento de estos buques - de más de 106 metros de eslora y más de 12 metros de manga - alcanza las 2.200 toneladas. Además, cada Gowind lleva a bordo artillería muy potente, así como armas antisubmarinas y sistemas de defensa antiaérea. Estas naves también pueden alojar un helicóptero. Su característica clave radica en el hecho de que las Gowind disponen de misiles antibuques Exocet, cuyo alcance ronda los 180 kilómetros. Famosos porque se hicieron conocidos durante el conflicto de las Malvinas en 1982 entre Argentina y el Reino Unido - pese a lo cual no pudieron cambiar el curso de la guerra, ya que al final los argentinos fueron derrotados - han evolucionado desde entonces, pero no son rivales para la poderosa Flota del Mar Negro, que ha sido profundamente modernizada por completo desde el 2014 con la reunificación de Crimea con Rusia y esta dotada de una gran cantidad de armamento, aviones , buques si como de misiles con tecnología de punta y para el 2020, se prevé que la flota reciba adicionalmente unos 50 barcos y buques de apoyo de gran tonelaje” puntualizó. Como podéis imaginaros, a pesar de todos los esfuerzos de los EE.UU. de querer armar a sus ‘aliados’ para tratar de ‘intimidar’ a Rusia no van a poder lograr su objetivo, ya que la ‘fuerza’ que representan las insignificantes flotillas de esos países no son una amenaza para los intereses rusos en la zona. Si lo intentan menuda sorpresa que se van a llevar. A que no asustan a nadie. Entiéndanlo de una vez por todas y tal como se les recordó en un reciente discurso el presidente ruso Vladimir Putin: Crimea es Rusia... y siempre lo será :)
Tras la presentación de los nuevos iPhone 8 y iPhone 8 Plus, Apple ha cumplido con las expectativas y ha anunciado el nuevo iPhone X, un modelo que cambia completamente el diseño de la familia 10 años después del primer iPhone. Se trata del modelo de smartphone de Apple más arriesgado y completo desde que hace ya diez años se presentará el primer iPhone. En su ficha técnica nos encontramos con numerosas novedades, giros y cambios respecto a las bases que Apple había mantenido para el iPhone en estos diez años. Las mayores novedades las encontramos en la pantalla y el diseño, a partir de cuya revolución también cambia la manera en que Apple pretende que interaccionemos con el dispositivo. Llevamos un par de años en que el diseño de un smartphone tiene que ver casi todo con la pantalla. El iPhone se había resistido a esa corriente renovadora y revolucionaria hasta este nuevo iPhone X, uniéndose así a Samsung o LG en la línea de diseño de smartphones donde todo el frontal es pantalla. Apple da varios saltos en apartados como el panel, la eliminación de marcos o la resolución, todos ellos tomando impulso una sola vez. El diseño del iPhone X se mueve alrededor de una pantalla de 5,8 pulgadas que curiosamente da lugar a un iPhone de menos altura (143,6 mm) y más manejable que el iPhone 8 Plus con menos diagonal. A destacar el ancho de 70 mm, y el grosor, inferior a los 8 mm. Su peso es de 174 gramos. Esto que parecía impensable en un iPhone se produce por la eliminación completa de los marcos. Todo el frontal del iPhone X es su pantalla, y el cambio respecto a modelos de iPhone anteriores es enorme si nos fijamos en los marcos superior e inferior. A tener en cuenta el diseño en forma de solapa de la pantalla en la parte superior, peculiaridad que tendrá sus pros y contras en relación con las aplicaciones y el sistema operativo. El acabado del iPhone X es en cristal, tanto para el frontal como en la trasera, y lleva protección contra agua y polvo. Para lograr esta ocupación total del frontal por parte de la pantalla, Apple se ha pasado a la tecnología OLED. Este cambio es bastante relevante en tanto que la tecnología IPS y concretamente el panel del iPhone, más allá de la resolución, ha sido durante estos años la referencia en términos de fidelidad y calidad. La nueva pantalla ha sido bautizada como Super Retina HD Display, y cuenta con una resolución de 2436x1125 píxeles para una densidad de píxeles de 458 ppp. Tiene 3D Touch, es HDR y compatible con Dolby Vision y HDR10, además de True Tone. Su brillo es el mismo que en iPhone anteriores, con 625 nits, tiene perfil P3 y en este caso, al ser OLED, contraste de 1.000.000:1. Como les ha pasado a Samsung o viene haciendo LG desde hace muchas generaciones, ocupar todo el frontal del smartphone con la pantalla lleva asociados sacrificios y cambios muy importantes. En el iPhone X desaparece el botón de inicio como tal y el control del terminal se basa en gestos para el control de pantallas, opciones y diferentes acciones en la interfaz de iOS 11. Respecto a la identificación de huella tan cómoda gracias a Touch ID, desaparece. No hay traspaso a la parte trasera como han hecho todos sus rivales (o al lateral como tiene Sony). El iPhone X pasa del Touch ID y arriesga con la identificación de rostros. El sensor facial o Face ID se sirve de sensores de infrarrojos para detectar nuestra cara desde diferentes ángulos e incluso con rasgos parcialmente ocultos. Según Apple, el reconocimiento es en 3D, lo que evitaría que una simple fotografía o máscara se usara para desbloquear el terminal. Para conseguirlo se valen de Neural Engine, tecnología integrada en el nuevo chip A11, y será capaz incluso de identificar rostros con gafas. El reto es importante. Por cierto, la identificación Face ID funcionará también integrada por terceros. iPhone nuevo, procesador de Apple de estreno. La máxima de la compañía se cumple a rajatabla en el nuevo iPhone X, smartphone que disfrutará del procesador A11 Bionic, un modelo desarrollado completamente por Apple y que cuenta con seis nícleos. Sin datos por ahora específicos, este procesador iría acompañado de 3 GB de memoria RAM y una GPU que por primera vez también ha sido creada por Apple completamente. Respecto a la batería, este nuevo iPhone X también ha sido el acicate para dar un paso adelante en un apartado donde en ciertos aspectos Apple se había quedado muy atrás. Si en autonomía real el iPhone ha podido mantener la competitividad gracias a la eficiencia, no ha pasado lo mismo en posibilidades de carga. Con el iPhone X esperamos ver mejora en la autonomía gracias al uso de la tecnología OLED en la pantalla, así como por la mayor capacidad de la batería. Apple ha realizado algo parecido a lo que vimos en su Macbook y ha aprovechado casa hueco disponible en el interior del iPhone X para colocar celdas de la batería.Más importante será ver la llegada de la carga inalámbrica al iPhone X, así como una esperada carga rápida que dejaba en ridículo al iPhone frente a sus rivales. Aunque en este iPhone 10 la atención se la lleva la pantalla y el cambio de diseño, no podemos nunca olvidarnos de lo que ha sido durante años un motivo de compra respecto al teléfono de Apple: la cámara, que vuelve a ser de tipo doble y potenciando o destacando el modo retrato. Son dos sensores de 12 megapíxeles, de más tamaño para mejorar los resultados en condiciones de poca luz, y que será capaz de grabar vídeo 4K a 60 fps. También contará con un modo de cámara lenta a 240 fps con calidad 1080p. La apertura de las cámaras es de f/1.8 y f/2.4, con diferentes distancias focales para conseguir el zoom 2X. La estabilización óptica alcanza a las dos cámaras, así como el uso de un flash de 4 LEDs. Y próximamente tendrá un modo retrato mejorado. Otro cambio importante en la cámara del iPhone X la encontramos en la cámara secundaria, que sube su resolución a 7 MP (f2.2) y añade modo de retrato. Apple, mucho después que los rivales, se ha dado cuenta de la importancia de esta cámara para selfies. El iPhone X empezará a venderse a partir del próximo 3 de noviembre, pero puede reservarse desde el día 27 de octubre. Podremos comprar las dos modalidades de colores (Silver y Space Gray) con precios de 1159 euros para el modelo con memoria interna de 64 GB y de 1329 euros para el de 256 GB :)
Como sabéis, los mercados occidentales ya no son los que sustentan la demanda de las grandes berlinas premium. En la última década el grueso de las ventas se ha desplazado a Oriente, particularmente a China. Es por ese motivo que cuando Audi se puso manos a la obra para reemplazar su A8 por esta nueva versión, atendió más a los requerimientos de los mercados de Asia-Pacífico (donde Japón y Corea del Sur son también buenos mercados para estos coches). Y eso ha influido en sus interiores, más amplios en su parte posterior que en las generaciones precedentes del modelo y con una mayor presencia de comandos digitales. El resultado es un diseño minimalista puesto que el conductor tiene concentrados en las pantallas táctiles todos los mandos. Su autor, el alemán Matthias Van Tuil, ha logrado una sensación de amplitud, forzando unas líneas muy horizontales, y al mismo tiempo de luminosidad. Y ha intentado un encaje estético de las pantallas, algo que no siempre es fácil. Quien lo dude que se lo pregunte a los responsables del diseño del Tesla S, poco logrado. El nuevo A8 impone un manejo distinto al de los coches hasta ahora conocidos. Se han eliminado los botones y pulsadores tradicionales para que las múltiples funciones disponibles se puedan activar desde una pantalla táctil de 25,7 cm que, cuando está apagada, parece casi invisible ya que esta integrada en un entorno negro muy brillante que denominan black-panel. El interfaz de usuario aparece al abrir el coche y sus ocupantes pueden operar el sistema con un dedo sobre la gran pantalla. También puede usar una segunda pantalla táctil en el centro de la consola para acceder al climatizador, las funciones de confort o para introducir texto de navegación o si se ha activado Internet a través del wifi del coche. Mientras lo hace, puede descansar la muñeca en la ancha palanca del cambio automático Tiptronic, diseñado así para que pueda cumplir con esta función. Cuando el conductor activa una función a través de ambas pantallas oye un click y siente una vibración a modo de confirmación de que su orden ha sido atendida, evitando así la incertidumbre que se producía en las pantallas táctiles utilizadas hasta ahora. Los pocos botones que han sobrevivido al diseño minimalista de Van Tuil responden de la misma manera cuando son pulsados. El nuevo Audi A8 llegará al mercado a comienzos de noviembre con un precio de entrada de 97.500 euros. Inicialmente se ofrecerán las variantes con motores menos potentes, pero a lo largo de 2018 la gama se completará con una versión híbrida enchufable, con capacidad para circular 50 kilómetros en eléctrico, cuya potencia combinada será de 449 caballos, y el W12, de 585 caballos. De esta manera, el nuevo Audi A8 llega dispuesto a revolucionar el segmento con niveles de potencia, lujo y tecnología que suben el listón todavía un poco más para sus competidores :)