El peligro que representan los millones de “refugiados” que invaden a diario el continente europeo - entre los cuales a no dudarlo, hay miles de comandos terroristas de ISIS - no parece tener ninguna importancia para Angela Merkel, quien por el contrario los anima a venir ofreciéndoles toda clase de facilidades que ya quisieran sus mismos compatriotas del Este de Alemania que la pasan muy mal, digan lo que digan las estadísticas “oficiales”. Sin embargo, esa situación puede cambiar porque cada día que pasa, no solo existe una cada vez mayor oposición a esta política realmente suicida, sino que ya se habla abiertamente de su inminente caída. En efecto, diversos analistas dan por descontado que la Merkel se juega los descuentos y que la alta desaprobación que genera también entre su propio electorado y sus colegas de coalición, aceleraran su salida. Así por ejemplo, The Financial Times afirmó en un artículo publicado este lunes que Merkel no sobrevivirá a esta crisis de “refugiados” generada por ella misma, el cual se ha vuelto en su contra: “¿Quién se iba a imaginar hasta hace poco que la autoproclamada Canciller de Hierro tiene los días contados y que su desafortunado proceder ha facilitado el ascenso de formaciones ultranacionalistas como PEGIDA? se lamenta el diario conservador, quien agrega: “es un secreto a voces que de la noche a la mañana, lo impensable se ha convertido en lo verosímil; y para muchos en su partido, lo mas probable. Cuando se dio inicio a la llegada masiva de “refugiados” procedentes de Oriente Medio, Merkel creyó que podía hacerse cargo de la situación y no hizo nada por detenerlos. Pero su enorme cantidad - Alemania espera la llegada de más de un millón este año - ha cambiado el cálculo. Ciudades y pueblos se han visto abrumados por la afluencia de estos terroristas en potencia. Y, en lo que es una herida potencialmente fatal para la canciller, hay una percepción de que ha perdido el control sobre la situación. Su popularidad se ha derrumbado y para agravar las cosas, no existe un candidato obvio para reemplazarla dentro de las filas de la CDU. Su caída sería el principio del fin no solo del Nuevo Orden Europeo que ella quiso construir desde Berlín, sino de la propia UE“ puntualiza la nota. A su turno, el columnista político John Vinokur, de 'The Wall Street Journal' comenta; “La interminable afluencia de refugiados a Alemania echa aún más leña al fuego a la ya de por si difícil situación política que podría llevar a Merkel incluso a abandonar el cargo. Ahora que la crisis de Oriente Medio afecta directamente a los países europeos, Merkel se enfrenta a varios y serios desafíos, en medio de una pérdida de poder e influencia que se acentúa cada vez mas”. La Merkel, implacable cuando se trata de obligar al resto de Europa a realizar brutales ajustes económicos - llevados hasta el extremo como en el caso de Grecia, para favorecer únicamente a que los grandes bancos y poderosos inversionistas recuperen su dinero invertido en ese país al costo que sea necesario, así se mueran de hambre los griegos, quienes primero deberan pagar puntualmente su deuda, que es lo único que les interesa, no importando si por ello quedan en la indigencia total - "sabe lo que es el orgullo". Según él, el conflicto en Oriente Medio se ha convertido en algo que Europa vive todos los días, y Merkel se comporta irresponsablemente como si no tuviera nada que ver con esto, cuando es la principal responsable de un desastre que no tiene cuando acabar. Según el columnista, en los últimos diez años Alemania ha sido la fuerza motriz en Europa, y Merkel, al frente de la política alemana, ha tenido todas las oportunidades para detener la desintegración de Siria y evitar la crisis migratoria actual. Sin embargo,"Berlín dio la espalda a todo ello, doblegándose a la política militarista de EE.UU. que utiliza a sus “socios” de la OTAN cual marionetas para dirigirlas contra Rusia en todos los frentes posibles". Según Vinokur, al menos un millón de “refugiados” sirios e iraquíes llegarán a Alemania este año. Cuando le preguntaron a Merkel sobre la llegada incesante de estos “refugiados” y la evidente amenaza que representa ISIS al permitirles llegar libremente a territorio europeo, Merkel dijo cínicamente: "Dios nos lo puso en el plato y tenemos la obligación de ayudarlos porque Alemania es una superpotencia moral", una respuesta tan simplona que le ha valido el rechazo del electorado alemán que repudia sus palabras. Según las últimas encuestas, menos del 32% de los alemanes están de acuerdo con la canciller acerca de la capacidad de Alemania de absorber el flujo masivo de musulmanes sirios e iraquíes, agrega Vinokur. Otro columnista, Alex Gorlach, sostiene en un artículo para 'The Huffinghton Post' que Merkel "ilusamente creía en la posibilidad de que Alemania hiciera frente a este problema, demostrando con ello que Europa vive según sus ideales", la realidad es muy distinta. “Y es que el proyecto postnacional que siempre ha buscado la Unión Europea, se está viniendo abajo debido a la discordia y a una atmósfera de desconfianza mutua entre los países europeos", señala el columnista, quien agrega “No cabe duda que Merkel esta perdiendo la lucha contra su propio electorado y colegas de la coalición de gobierno, lo que podría conducir a su dimisión, ahora que la atmósfera en Alemania se caldea con el auge de movimientos ultranacionalistas como PEGIDA que cada día gana mas adeptos ya que están convencidos del peligro real que representan quienes se hacen pasar por refugiados, cuando en realidad no lo son", concluye Gorlach. En efecto, los rumores de una crisis de Gobierno en Alemania, provocada por las críticas internas a la política de asilo e inmigración de Angela Merkel, se multiplican a medida que pasan los días. Según el Frankfurter Allgemeine Zeitung, la Unión Social Cristiana (CSU), el partido conservador bávaro con el que la CDU de Merkel forma coalición, "está dispuesta a todo" y algunos no descartan incluso la retirada de sus ministros, lo que obligaría a la canciller a gobernar en minoría con los socialdemócratas. Esto equivaldría, según Berthold Kohler, a "una bomba atómica" en términos políticos que paralizaría al Gobierno en un momento crucial. Al respecto, Der Spiegel en su edición digital se hizo eco de las declaraciones del vicecanciller Sigmar Gabriel, quien ha afirmado que la capacidad de gestión del Gobierno alemán está en riesgo. De otro lado, el Gobierno bávaro ha puesto un ultimátum al Ejecutivo central, al que ha exigido que apruebe medidas extraordinarias para limitar la entrada de estos “refugiados”, de lo contrario, afirmó su presidente, Horst Seehofer, el Gobierno regional se reserva la posibilidad de adoptar "medidas de emergencia" de manera unilateral. Como sabéis, las tensiones entre el Ejecutivo bávaro y el Gobierno central han aumentado en los últimos meses a raíz de la crisis de “refugiados” que afecta de manera especial al país, reviviendo y acentuando las diferencias regionales entre ambos. Según los datos actualizados de la agencia Frontex, 710.000 migrantes entraron en la UE entre enero y septiembre de este año. Se espera que Alemania al ser uno de los objetivos principales de los “refugiados” en Europa, acoja un total de 1,5 millones en el 2015. ¿Y donde los van a colocar? ¿No existen ya millones de turcos en suelo germano para aceptar más parásitos? ¿Adonde quiere llegar? ¿Pretende obligar a los países de la UE a que se hagan cargo de los demás? ¿Qué derecho tiene a tomar decisiones en nuestro nombre? ¿Quien se cree que es? No a la islamización de Europa :(