Se trata una cámara muy completa con la garantía de una marca de calidad, ideal para adquirirla en esta Navidad. Sin embargo, parece que lleva muy pocas novedades como para considerarla una gama nueva de Nikon Puede que parezca cruel decir que sea una más, sobre todo cuando hablamos de una réflex de buenas prestaciones. Pero no termina de entenderse bien por qué la marca japonesa se empeña en llenar los estantes de las tiendas de cámaras que apenas se diferencian entre si. La nueva Nikon D5200 bien podría ser una pequeña actualización de la D5100, pero Nikon insiste en diferenciarlas y mantener ambas cámaras en los escaparates. Esta nueva cámara cuenta con sensor CMOS de 24,1 megapíxeles. La resolución del sensor ha crecido notablemente con respecto a la D5100, pero no el tamaño de este. Esto significa meter más píxeles en un sensor del mismo tamaño, algo que no termina de convencer a muchos fotógrafos. La otra mejora significativa es la inclusión de un sistema de enfoque automático de 39 puntos. Este sistema es hermano del de la D7000, un peldaño por encima en la gama de cámaras réflex de la marca. El resto de los aspectos técnicos mantiene las mismas características que el modelo anterior. Cuenta con una pantalla de tres pulgadas de diagonal con una resolución de 920.000 píxeles. Esta pantalla se puede levantar del cuerpo de la cámara y moverse para adecuarse a ángulos de toma extraños. Esta funcionalidad resulta especialmente práctica a la hora de tomar vídeos. El vídeo es precisamente uno de los puntos más importantes de esta cámara. Es capaz de grabar tomas de vídeo con una resolución Full HD (1.080 píxeles de ancho) con una velocidad de refresco de 60 cuadros por segundo. Es un valor muy interesante, ya que permite grabar escenas con una gran calidad de vídeo. Además, incorpora también un micrófono estéreo en el cuerpo de la cámara. Una de las novedades que podrían haber sido más interesantes habría sido la inclusión de conexión WiFi de serie en la cámara. Sin embargo, Nikon no se ha decidido a dar este paso, al menos del todo. Se podrá acceder a esta función a través de un adaptador inalámbrico WU-1a, pero no estará incluida por defecto en la cámara. Contar con Wifi en la cámara de fotos puede abrir la puerta a muchas posibilidades muy interesantes. Se podrían descargar las fotos directamente en el ordenador sin necesidad de cables, o utilizar en móvil como periférico de la cámara. La Nikon D5200 ya esta disponible en las tiendas y viene en varios colores: negro, bronce y rojo. El precio arrancará en los 900 euros si decidimos adquirir sólo en cuerpo de la cámara. El pack con un objetivo básico 18-55 milímetros tendrá un precio de unos 1.030 euros o el equivalente a tu moneda local :)