En esta ocasión nuestra atención se dirige a Turquía, donde el dictador Recep Tayyip Erdogan, furioso con el avance de los kurdos en su guerra contra ISIS - a quienes el apoya y permite que sus milicias sean entrenadas en suelo turco por instructores de la CIA y el Mossad israelí – los cuales en su desesperada huida han cruzado la frontera sirio-turca para evitar ser liquidados por los aguerridos combatientes del PKK (el Partido de los Trabajadores del Kurdistán), ha decidido actuar de inmediato y salir en su defensa, iniciando una serie de bombardeos en territorio sirio no para combatir a ISIS - tal como pregona maliciosamente la prensa occidental - sino para detener a los kurdos a quienes ve como una potencial amenaza a la existencia misma de Turquía. Como sabéis, el 25% de la población turca es kurda (el mayor pueblo del mundo sin Estado y victima de continuas represalias, masacres y genocidios a lo largo de su historia – al igual que los armenios - por parte de Ankara por el único “delito” de querer ser libres) y Erdogan, un despreciable sátrapa oriental que en su locura se cree la reencarnación de Solimán el Magnifico, está aterrorizado ante la perspectiva de perder una gran porción de ese territorio ocupado ilegalmente por Turquía, si el Kurdistán sirio, junto con el iraquí, se liberan, ya que el Kurdistán turco sería la siguiente ficha en caer en ese dominó. Ese es el verdadero motivo de sus demenciales acciones emprendidas desde el pasado fin de semana al margen de la legislación internacional en territorio sirio, en un acto que puede ser considerado como un Crimen de Guerra. Una de las principales razones para aceptar que entrenaran en campamentos turcos los mercenarios de ISIS, es que ellos - en retribución - pudieran mantener a raya a los kurdos en Siria e Irak y con ello la integridad territorial turca estaría más segura. Sin embargo, la realidad es muy distinta. Y es que los combatientes del PKK que tienen años de experiencia en combatir al ejército turco, no han tenido problemas en hacer frente a esa banda de criminales y ponerlos en desbandada, lo que ha llenado de preocupación a Ankara, que ha decidido intervenir militarmente para evitar el descalabro total de sus aliados. “Los comandantes de ISIS nos dijeron que no temiéramos nada a los turcos porque había plena cooperación con ellos y nos confirmaron que no pasaría nada mientras combatíamos a los kurdos” dijo a Newsweek un extécnico de comunicaciones del grupo terrorista. “ISIS ve al Ejército turco como su aliado, especialmente cuando se trata de atacar a los kurdos en Siria. Y ello se debe a que los kurdos son el enemigo común de ISIS y de Turquía” admitió. Es por esa razón que Erdogan, al enterarse del avance kurdo amenazo: "Nunca permitiremos un Estado en el norte de Siria”, demostrando su temor de que extiendan un corredor que una sus dominios orientales y los occidentales, ahora separados, cortando una vía de suministro de ISIS que Turquía apoya. Su plan para evitarlo, según han publicado medios turcos, es crear una zona 'tapón' de 110 Km de largo por 33 Km de ancho en el norte de Siria. Los efectos de esta área - apoyada por EE.UU. en esta guerra de agresión que sufren los sirios - es frenar a los kurdos, facilitar a ISIS la capacidad de nutrirse de armamento y mercenarios desde Turquía y presionar al gobierno de Bashar Al Asad, su gran enemigo. Precisamente el Presidente sirio denuncio este domingo en Damasco las mentiras e hipocresías de Occidente, al afirmar que las superpotencias dicen que “luchan” contra ISIS - un monstruo creado por ellos mismos - cuando en realidad se han convertido en sus principales patrocinadores, al tiempo que ha asegurado que su objetivo en Siria consiste en dictar sus demandas y satisfacer sus propios intereses. Luego de lamentar los apoyos multilaterales de países occidentales al terrorismo, ha apostillado que este fenómeno carece de límites y ha recordado que el Gobierno de Damasco había advertido repetidamente de los peligros que supondría su crecimiento en la región de Oriente Medio. Recordó asimismo que la guerra que azota a los sirios desde hace más de cinco años es una guerra impuesta contra su país: “Siria nunca ha buscado por guerras, pero si se nos impone una, el Ejército sirio resistirá en todos los puntos” aseveró. Finalmente ha reiterado que la prioridad del Gobierno de Damasco, “consiste en lograr la liberación total de todas las regiones controladas por los grupos terroristas patrocinados por los EE.UU., y que el Ejército sirio cuenta con la capacidad necesaria para hacerles frente” puntualizó. También al PKK - cuyo proceso de paz con Ankara está prácticamente liquidado - ha advertido que, si los turcos invaden Siria, harán de Turquía un campo de batalla. No cabe duda que la espiral de violencia se incrementara invariablemente en esta zona debido a la decisión de un demente y asesino como Erdogan quien al igual que sus socios sionistas, cree que la mejor defensa es el ataque. Pero parece que los agresores se olvidan de Rusia, el cual no permitirá que lleven a cabo sus pérfidos planes contra Siria. Ya puso en su sitio a la OTAN cuando intento invadirla y lo volverá a hacer con Turquía una vez más :)