Maldita sea la hora en la que este despreciable ser ha llegado al mundo ya que con sus disparatadas acciones y en un arrebato de locura podría desencadenar la III Guerra Mundial. Venga ya ¿Que se podía esperar de un tipo tan impresentable como Donald Trump y el grupo de psicópatas que lo rodea - cual bestias sedientas de sangre - quienes han vuelto a dirigir su mirada asesina a Siria, desangrada luego de siete años de una criminal agresión propiciada precisamente por Washington a través de grupos terroristas por ellos financiados en su afán de apoderarse del país para facilitar a través de su territorio el transporte de gas natural de Qatar a Europa, pero al salir mal la jugada debido a la intervención rusa (que mediante sus quirúrgicos bombardeos aéreos arraso con el ilusorio ‘califato’ de ISIS bajo toneladas de bombas), no quieren soltar a su presa y mediante un burdo operativo de bandera falsa intentan hacernos creer acerca de un ‘ataque químico’ contra las ultimas posiciones de los terroristas en la localidad de Duma, en Guta oriental- ubicada en las inmediaciones de Damasco - ‘con centenares de muertos’ según los llamados Cascos Blancos (una desacreditada ONG creada por la CIA y cuyos vínculos con los terroristas son mas que conocidos), para ‘justificar’ una intervención militar en el país. A pesar de que este lunes en una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU, Rusia ha demostrado con pruebas contundentes que no hubo un ataque químico en la zona, a esa misma hora Trump ha amenazado vociferante que ‘todos pagaran un precio’ porque para el ‘no cabe ninguna duda’ que ese ‘horripilante’ hecho ‘ocurrió’ por lo que no ‘descarto’ ninguna acción militar, demostrando que este operativo de bandera falsa fue preparado de antemano para impedir el avance victorioso del ejercito sirio en sus esfuerzos de liberar al país de las garras de la bestia sionista. Que coincidencia que este ‘ataque químico’ ocurriera justo cuando la guerra contra ISIS esta prácticamente ganada. Muchos recordaran que similar acusación se le hizo a Damasco el año pasado, para intentar detener la ofensiva de su ejército que había comenzado a ganar terreno en el campo de batalla, siendo bombardeado por los EE.UU. a modo de ‘castigo’ cuando al final se descubrió que todo había sido - como ahora - una gran mentira. Entretanto, el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, ha declarado que Moscú está profundamente alarmado por el hecho de que varios Estados, como EE.UU., el Reino Unido y Francia, hayan deliberadamente establecido rumbo hacia una escalada de tensiones en la arena internacional. Estos países usan el chantaje, la difamación, las sanciones y la amenaza de uso de fuerza contra un Estado soberano. Una actitud descarada no se había registrado ni en la época de la Guerra Fría, ha subrayado el diplomático ruso. Nebenzia sugirió a los expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) volar de inmediato a Siria para investigar el supuesto ataque químico en Duma, asegurando que las autoridades sirias y los militares rusos les apoyarán en todo. Con respecto al supuesto ‘ataque químico’ en la ciudad siria de Duma, Nebenzia ha subrayado que el hecho no está confirmado. “Luego de la liberación de Duma, los especialistas rusos de protección biológica, radiológica y química llegaron allí para la recopilación de datos. Tomaron muestras de suelo, que no mostraron la presencia de ningún compuesto nervioso y de cloro, también entrevistaron a los residentes locales y a quienes que dejaron de luchar”, ha explicado Nebenzia. “Ninguno de los (residentes) locales confirmó el hecho de un ataque químico. El hospital local no ha ingresado a ningún paciente con síntomas de envenenamiento con sustancias tóxicas como sarín y cloro. En Duma no hay otras instalaciones médicas. No encontraron ningún cuerpo de víctimas afectadas, los (residentes) locales no tienen información sobre posibles lugares donde fueron enterradas. De este modo, el hecho del uso de sarín o cloro en Duma no está confirmado”, ha reportado el representante ruso ante la ONU, quien ha sugerido que este operativo de bandera falsa es un intento de redirigir la atención de la comunidad internacional tanto del caso Skripal - donde el Reino Unido acuso a Rusia de ser el ‘responsable’ del envenenamiento de un ex espía ruso - como del genocidio del pueblo palestino a manos de los sionistas en Gaza, crímenes abominables de los que Trump y su camarilla no dicen una sola palabra, indicó. Esta claro que el verdadero objetivo de estas amenazas contra la integridad de Siria por parte de los EE.UU. es salvar a ISIS de su aniquilación total y ‘justificar’ sus ataques militares, puntualizó el diplomático. Al respecto, Finian Cunningham, fiel a su estilo, nos da varios detalles sobre esta nueva trama montada por Washington y sus aliados, que vale la pena traducir y reproducir su artículo, entrecomillado claro está ¿vale?: “El supuesto ‘ataque con armas químicas’ del último fin de semana contra civiles en Siria tiene todas las características de ser un nuevo operativo de bandera falsa montado por los EE.UU. para atacar a Siria al ver desbaratados todos sus planes de dominación con la derrota de ISIS. Hay muchos motivos para creer en la falsedad de esas absurdas acusaciones dirigidas contra Damasco y es que las imágenes y vídeos mostrados en las últimas horas en las redes sociales para ‘demostrar’ tal ‘atrocidad’ son una burda falsificación y que fueron elaborados por grupos desacreditados como los llamados Cascos Blancos, integrado por los mismos terroristas y cuya ‘objetividad’ por consiguiente es nula, pero que extrañamente es elogiado en los medios occidentales ‘como una fuente respetable’ (?). Pero para todos aquellos que no nos dejamos engatusar con esas burdas patrañas, toda la información que propala esa agencia de propaganda no solo debe ser tomada con extrema precaución, sino con hondo desprecio. Asimismo, a pesar de que esas informaciones propaladas sobre las presuntas 'víctimas' de un 'ataque químico' no pueden ser verificadas por fuentes independientes, son transmitidas de manera rápida por los medios noticiosos occidentales, quienes no dudan en señalar tanto al régimen sirio como a sus aliados rusos de ser los ‘responsables’ de algo que no ocurrió. Esta campaña mediática de desinformación es utilizada por Trump para llegar a la conclusión ‘deseada’ de que tanto Siria y Rusia son los ‘culpables’, buscando así su anhelada intervención militar ‘en respuesta’ al ‘horrible’ crimen contra civiles, que solo cabe en su retorcida imaginación. Esto también puede estar relacionado con el otro operativo montado por el Reino Unido contra Rusia, al cual acuso falazmente del envenenamiento de un ex espía ruso, pero al quedar al descubierto que se trato de un gran engaño, tratan de encubrir su fracaso orquestando un nuevo incidente para socavar a Rusia internacionalmente, y que mejor lugar para montarlo que en Siria, donde la intervención de Moscú sepulto bajo toneladas de bombas al ilusorio ‘califato’ de ISIS para rabia de Occidente que veía impotente el colapso de su aliado. Es por ese motivo que el supuesto ‘ataque químico’ en Siria es otro operativo de bandera falsa, con mayor razón cuando la guerra contra ISIS esta ganada y el régimen sirio no tiene armas químicas en su poder ¿Cómo podría utilizar algo que no posee? Sin embargo, la pregunta que uno se hace es: ¿por qué llevó tanto tiempo a los perpetradores realizar aquella farsa? Durante los últimos dos meses, el gobierno sirio y la inteligencia militar rusa han estado advirtiendo que un evento de bandera falsa que involucraba armas químicas era inminente con el objetivo de detener el avance victorioso del ejercito sirio en su plan de liberar al país de la garras de ISIS. La inteligencia rusa ha proporcionado en varias ocasiones información detallada que muestra el movimiento clandestino de materiales químicos por parte de los terroristas con el apoyo de la CIA. Esto fue mientras el ejército sirio lanzaba su ofensiva en febrero para retomar el último gran bastión que quedaba en manos de los criminales, en el suburbio de Guta Oriental, cerca de la capital, Damasco. A medida que el ejército sirio recuperaba constantemente la vasta y extensa área, junto con el apoyo aéreo ruso, hubo informes creíbles de que se encontraron laboratorios improvisados que habían sido abandonados por los terroristas en su huida. Esos ‘laboratorios’ estaban llenos de barriles de cloro, el químico volátil y tóxico que ahora se supone que se ‘usó’ contra civiles el último fin de semana. Como en incidentes previos del presunto ‘uso’ de armas químicas, el número de ‘heridos’ nunca se verifica. Las secuencias de video que emanan de los terroristas no se pueden confirmar en términos de números, fechas e incluso ubicación. Este fue el caso en el infame incidente de agosto del 2013 en Guta oriental, así como el presunto ‘ataque’ de gas sarin en la provincia de Idlib el 4 de abril del 2017. Los estudios de la ONU que ‘reivindican’ la responsabilidad pasada del gobierno sirio se han llevado a cabo de forma sesgada y se basan en gran medida en los testimonios de los terroristas, por lo que no tienen ningún valor Los intentos de Rusia y Siria de enviar equipos de inspección independientes sobre el terreno siempre han sido bloqueados por los EE.UU., Gran Bretaña y Francia en el Consejo de Seguridad de la ONU, temerosos de que se descubra la verdad. Siria y Rusia afirman que es probable que el último uso no verificado de cloro gaseoso haya sido una provocación protagonizada por los últimos terroristas para evitar la evacuación final de Guta Oriental. Como sabéis, luego de casi dos meses de intensa lucha, las fuerzas armadas sirias y los aliados rusos expulsaron a los terroristas del suburbio donde habían instaurado un régimen de terror durante los últimos seis años. Civiles liberados del asedio terrorista, han contado miles de historias de horror acerca de cómo vivían cautivos a manos de la barbarie sionista. Los civiles fueron mantenidos en jaulas en las calles, utilizados como escudos humanos y enterrados vivos bajo toneladas de escombros Las jóvenes fueron secuestradas de sus familias y violadas asta la muerte, mientras que las medicinas y los alimentos fueron acumulados y utilizados exclusivamente por los criminales financiados por Washington. Estos son los grupos a quienes los medios occidentales consideran ‘rebeldes’ (?). Con la liberación total de Guta Oriental por el ejército sirio, con decenas de miles de civiles ahora atendidos en centros de socorro administrados por médicos sirios y rusos y otros trabajadores humanitarios, una afirmación de que las fuerzas sirias y rusas habrían usado armas químicas contra esa escoria que ya estaba completamente derrotada es simplemente absurda. En cualquier caso, el gobierno sirio ha declarado en repetidas ocasiones que nunca ha usado municiones químicas, ya que su arsenal fue destruido por un acuerdo auspiciado por la ONU en el 2014. Por ello, es indudable que el último ‘incidente’ en Ghouta oriental es un evento de bandera falsa con el objetivo de impedir la reunificación de Siria, ya que con la liberación de Ghuta, queda solo el extremo oriental del país, donde los EE.UU. tienen tropas y entrenan a grupos terroristas para seguir desestabilizando al régimen del señor Al Assad. Tras el pasado ataque militar realizado en el 2017, donde Trump ordeno casi 60 ataques con misiles de crucero en Siria, Rusia ha advertido que cualquier nuevo ataque militar de Washington, no sería tolerado sin una respuesta armada por parte de Moscú. Si bien la semana pasada, Trump hizo un sorpresivo anuncio acerca de que quería retirar las tropas estadounidenses de Siria, todo se trato de un engaño deliberado ¿fue esta atrocidad escenificada el fin de semana en Guta Oriental un último intento de los halcones estadounidenses, la CIA y el Pentágono, para involucrarlo en una guerra abierta contra Rusia? Ya veremos. Pero este operativo de bandera falsa se ha intentado tantas veces en Siria por la inteligencia militar de la OTAN y sus representantes en el terreno, como ISIS, que existe un cansancio entre el público occidental que haría inviable políticamente cualquier intervención militar directa en Siria por parte de los EE. UU. y sus aliados europeos. Quien sea que esté organizando repetidamente estos operativos parece haber perdido la habilidad hace tiempo” puntualiza la nota. Lamentablemente, todo parece indicar que la Bestia se ha decidido a iniciar un conflicto de insospechadas consecuencias que nos puede arrastrar a una conflagración nuclear. Para los halcones neoconservadores como el recién nombrado Asesor de Seguridad Nacional de Trump, John Bolton, ‘el mundo es América y Estados Unidos es el mundo’, por lo que la guerra es única ‘solución’ para todos los problemas ¿Quién es el animal ahora? :(