X-37B : Una nave espacial cuya misión esta envuelta en el misterio
El avión espacial X-37B de la Fuerza Aérea de Estados Unidos ha estado viajando por la órbita de la Tierra durante más de 400 días en una misión secreta, según ha informado la NASA. La nave se lanzó en diciembre del 2012 y regresó el pasado martes, completando la tercera misión del un programa conocido como OTV (Prueba de Vehículo Orbital). Por ahora, el récord de resistencia en el espacio de un vehículo de esta misión es el OTV-2 en 2011, que estuvo 469 días circundando la Tierra. Además, esta nave ha llevado a cabo una prueba más, la primera (OTV-1), que se produjo en 2010 y en la que aguantó 225 días en el espacio. En el caso de OTV-1 y OTV-2, las naves aterrizaron en la Base Aérea Vandenberg (California). Sin embargo, el X-37B ha finalizado su misión en esta tercera prueba en el Centro Espacial Kennedy de la NASA (Florida), con el fin de que éste pueda ser el escenario fijo de estas actuaciones. El vehículo X-37B ha sido construido por Boeing para la Fuerza Aérea, pero la información acerca de la carga de los aviones y su robótica es "clasificada", según ha apuntado la agencia espacial estadounidense. Se cree que el X-37B es un avión espacial no tripulado diseñado para probar futuras tecnologías de vuelo espacial durante su estancia en órbita y reingreso a la atmósfera. La NASA comenzó este proyecto en 1999 y, posteriormente fue transferido al Departamento de Defensa de Estados Unidos, en 2004. Tras conocerse el vuelo de la nave en la OTV-1, el Gobierno chino mostró en los medios de comunicación su "preocupación" por esta misión. Se cuestionó si este programa secreto podría conducir al uso de armas espaciales, como, por ejemplo, la utilización de satélites espías. También Corea del Norte o Afganistán se hicieron eco del paso de esta nave por encima de su territorio. El vehículo fue descubierto en muchos casos por astrónomos aficionados. Éstos, apuntaron que la nave pasa sobre un mismo punto de la Tierra cada cuatro días y opera a una altura de unos 40.000 kilómetros, lo que sería típico de un satélite de reconocimiento militar. El secretismo que la rodea ha disparado toda clase de especulaciones acerca de su enigmática misión. Fabricado por Boeing, mide casi nueve metros de largo, tiene una envergadura de 4,5 metros y pesa 5.000 kilos, pudiendo volar de forma independiente durante largos periodos de tiempo sin necesidad de aterrizar en algún lugar. No cabe duda que el espacio es el otro campo de batalla del espionaje :(