¿Quién es ese gracioso perro con unas orejas grandes como las de un murciélago, un cuerpo robusto y unos ojos sonrientes? Es el Bulldog Francés.No es una raza común, pero es único en el mundo canino, con un talante de lo más encantador y con unas maneras deliciosas. Si bien sus orígenes se remontan a la década de 1850, sus inicios podemos hallarlo en Inglaterra, con el Bulldog Inglés, descendiente de las razas de tipo mastiff. Los Bulldog Ingleses eran populares en Inglaterra ya hacia el siglo XVIII, y lamentablemente los deportes de presa en los que participaban toros, osos y tejones eran importantes fuentes de entretenimiento en ese entonces. Cuando en 1835 las peleas entre animales fueron abolidas en Inglaterra, el Bulldog Inglés ya era muy conocido y se le consideraba como símbolo de valentía y resistencia. Irónicamente, la prohibición parlamentaria logró promover las peleas de perros, aunque las luchas de otros animales desaparecieron con bastante rapidez. Al final, los aficionados al Bulldog Inglés comenzaron a diversificarse. Para tener perros más rápidos y ágiles, un grupo cruzó los suyos con algunas de las razas de terrier, y estos perros acabaron por ser el Bull Terrier y el Staffordshire Bull Terrier. Estos cruces de bull y terrier eran ideales para las peleas entre perros y la popularidad de esta actividad continuó creciendo, a pesar de lo ilegal de este pasatiempo. Las peleas entre perros requerían menor espacio que un concurso de presa de toros, así que las autoridades tuvieron más bien poco éxito en el control de esta sangrienta e ilícita actividad. Otro grupo de aficionados que no estaban interesados en las peleas de perros, comenzó a criar un Bulldog de pequeño tamaño que pesaba un mínimo de 7,3 kg pero no más de 11,8. No sólo existía una gran diferencia de pesos entre estos perros, sino que también diferían en su conformación. Algunos ejemplares tenían las orejas tiesas, otros tenían el dorso largo o eran de patas largas, y algunos tenían la cara chata o el hocico largo. Estos perros encontraron poco apoyo entre los criadores ingleses de Bulldog Inglés. De todas formas, hubo a quienes les gustaban y los acogieron. Los pequeños Bulldog de Inglaterra acabaron por ser llamados Bulldog Miniatura. Estos canes recibieron poco apoyo, y en 1920 el último de estos perros aparecía en el libro de orígenes genealógico del Kennel Club de Inglaterra. Su situación cambio cuando fueron llevados a Francia donde tuvo tanta aceptación que paso a ser conocido como Bulldog Francés. Hacia finales del siglo XIX, era lo suficientemente popular en Francia y fue exportado de vuelta a Inglaterra de donde paradójicamente casi se había extinguido. Cuando los estadounidenses ricos viajaban a París a finales del siglo XIX, quedaban encantados con este pequeño perro que podían ver en los bulevares de la capital francesa, y pronto fueron exportados a EE.UU. donde se hicieron muy conocidos y hasta lo “adoptaron” como suyo. ¿Quien se iba imaginar que esta pequeña mascota, debido a su aspecto original y su singular carácter, de ser inicialmente un perro del pueblo, que tenia como amos a los carniceros y cocheros, paso más adelante a formar parte de la alta sociedad y el mundo artístico? Venga ya, si me anime a ocuparme de el es que mi sobrina tiene uno de ellos y me parece de lo mas gracioso con esa gran cabeza y esos ojos saltones. Miren esa cara… si que es un bandido :)