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miércoles, 14 de septiembre de 2022

QATAR 2022: Controvertido hasta el final

Son wahabitas, una versión puritana del Islam, aunque más “liberales” que sus vecinos sauditas. Y si bien tienen un sistema judicial “laico”, la ley islámica, la Sharía, se aplica todavía en cuestiones de familia y herencia. Hablan árabe, pero más el inglés. Nos referimos al Emirato de Qatar, donde dentro de poco se realizara el Mundial de futbol más polémico y controvertido que se recuerde. Su jefe de gobierno es el emir Thamim bin Amad al Thani, de 42 años. La imagen del monarca absoluto es onmipresente. Incluso cuelgan grandes gigantografías suyas en los edificios, al estilo Gran Hermano de George Orwell. Su familia gobierna el país como si fuera de su propiedad desde hace casi 200 años. Por cierto, en Qatar lo que falta son qataríes. Les sobra gas (son la tercera reserva mundial) y en consecuencia dinero (tienen la mayor renta mundial per cápita del planeta). También abunda el calor, pero los ciudadanos son muy pocos, unos 250.000. El resto de los 2.700.000 habitantes son inmigrantes extranjeros que vienen en su mayor parte de la India, Irán y países africanos a trabajar, prácticamente como esclavos, según Amnistía Internacional, que califica al Mundial como el torneo de la vergüenza. Como podéis imaginar, en Qatar no existen partidos políticos, ni nadie puede cuestionar las decisiones del déspota oriental que los gobierna. Hacerlo podría acarrearle a quien lo haga la pena de muerte por decapitación. Así de “democrático” es Qatar. De otro lado, debido a que su religión lo prohíbe, tampoco se vende alcohol, salvo en los hoteles donde hay turistas occidentales. Para el Mundial, según se acaba de anunciar hace unas horas, se permitirá a los aficionados con entradas comprar cerveza con alcohol en los partidos de la Copa del Mundo tres horas antes del inicio del partido y una hora luego del pitido final, pero no durante el partido, dijo una fuente con conocimiento de los planes para el torneo. Budweiser, uno de los principales patrocinadores de la competencia con derechos exclusivos para vender cerveza en el torneo, servirá cerveza dentro del perímetro que rodea cada estadio, pero no en las gradas ni en la explanada del estadio. Cabe precisar que los visitantes no pueden traer alcohol a Qatar, ni siquiera desde el aeropuerto libre de impuestos, y no pueden comprar alcohol en la única licorería del país, en las afueras de Doha. Solo los residentes extranjeros con permisos pueden comprar allí exclusivamente para el consumo doméstico. “Quien infrinja las normas será detenido y expulsado inmediatamente del país” preciso la fuente. Algunas notas sueltas: prácticamente todos los hombres usan una barba corta y prolija, llueve nada unas diez veces al año, no hay industria (salvo la petrolera) ni agricultura, todo está limpio, los autos son grandes, en los shoppings están las mismas marcas que en las ciudades europeas, en una sociedad arcaica donde los hombres pueden tener hasta cuatro esposas, las cuales no tienen ningún derecho y pueden ser repudiadas en cualquier momento por su marido o incluso muertas a pedradas por “infieles” si así lo determina su dueño y señor, “amparado” obviamente en la ley islámica. Las mujeres son obligadas a llevar una túnica negra que llega hasta el suelo. Algunas tienen la cara al descubierto, otras solo los ojos y las menos ni siquiera eso. El velo se llama hiyab. Y pobre aquella que se atreva a quitárselo, ya que se arriesga a ser calificada de “prostituta” y ser lapidada por su marido y sus propios hijos. Así de barbaros son. Una más: en Qatar los ciudadanos no pagan impuestos. Por derecho, no por evasores. Pero la gran cuestión que ocupa a los qataríes es la actual situación política que sucede en el mundo, donde EE.UU, provoca en forma constante y deliberada tanto a Rusia como a China, lo cual puede desencadenar un conflicto de mayor envergadura y gravedad, perjudicando la realización del inminente torneo, como la llegada de miles de aficionados al país que se verían imposibilitados de viajar. Como sabéis, Qatar ganó la sede en el 2010, en una votación cuanto menos polémica, ya que hubo dinero por debajo de la mesa para ser favorecida con la sede. Y desde entonces trabajaron intensamente para organizar un mega torneo que observará el mundo entero en un lugar donde además no existe tradición futbolera alguna: la Copa será otra manera de mostrarse al mundo. Marketing puro. Y caro: la inversión supera los 6.500 millones de dólares. Esa Copa tendrá varias particularidades. Una es que se jugará entre los meses de noviembre y diciembre, por el calor: en junio-julio el verano qatarí lleva la temperatura hasta los 50 grados y es obvio que así no se puede jugar. Pero la característica más destacable es que los 8 estadios (con nombres difíciles de retener casi todos) cuentan con aire acondicionado y se ubican a una distancia máxima entre sí de 55 kilómetros y a una mínima de 5. Unidos, además, por líneas de metros subterráneos y trenes. Es decir, los aficionados podrán acudir por primera vez a más de un partido por día. Y no deberán viajar con sus selecciones cambiando de sede. Una vez instalados, se podrán quedar en el mismo lugar toda su estadía. Lo mismo vale para los equipos, claro: no deberán preocuparse por conseguir diferentes concentraciones o sufrir viajes extenuantes entre partido y partido. Las entradas se han vendido con un sistema parecido al del Fan ID que se usó en Rusia 2018 y con ellas en el smartphone se podrá ingresar a la cancha, los cuales además, recibirán información en vivo de los partidos que se están mirando. Parte de la inversión fue el impulso a una liga local, la Star League, de 12 equipos, para los cuales importaron a veteranas estrellas del futbol europeo que por una buena pasta se prestaron al juego. Queda así un camino espinoso hasta entonces, es verdad, más allá de que ni Mahoma (el profeta desnudo del Islam) sabe y es que final - a pesar de todos los cuestionamientos que se le pueden hacer a los qataríes por la forma innoble en haberlo conseguido - el Mundial pueda llegar o no a tener éxito en todo sentido, especialmente en lo económico, buscando recuperar todo lo invertido, que para ellos lo deportivo es secundario. Faltan pocas semanas para su inicio y podran comprobarlo :(
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