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miércoles, 25 de octubre de 2023

ISRAEL: Por sus crímenes los conoceréis

El bárbaro asesinato de cientos de mujeres y niños en un hospital de Gaza por la aviación israelí, demuestra hasta qué punto la bestia sionista ávida de sangre, está dispuesta a llegar con el fin de lograr sus demenciales objetivos de exterminar completamente a la población del martirizado enclave palestino, considerada la mayor cárcel a cielo abierto del mundo. Como sabéis, la semana pasada mencionamos el asesinato de cientos de palestinos este año, previo a la operación militar de Hamás el pasado 7 de octubre que significó un duro golpe a los ocupantes sionistas del territorio palestino, ocasionando la muerte de miles de soldados, policías y colonos paramilitares de asentamientos ubicados frente a la bloqueada Franja de Gaza, En represalia y con todo el poder de fuego que posee, en los días siguientes los sionistas asesinaron a mas de 4 mil civiles palestinos, junto a la destrucción de miles de casas y edificios, debido a los incesantes bombardeos aéreos que no tienen cuando acabar. De esta manera, una Franja de Gaza sin energía eléctrica, ni agua, ni alimentos ni medicinas y de la cual no se puede escapar, es víctima de una política de tierra arrasada. Cabe precisar que este método sanguinario practicado por los sionistas no es algo reciente, sino que hunden sus raíces desde el momento mismo del nacimiento de esa entidad en mayo de 1948. Una acometida criminal que con total impunidad se ha convertido en algo rutinario y que en estos días ha significado miles de muertos, de los cuales mil son niños menores de 16 años. Cifra incrementada salvajemente en función del bombardeo por parte de Israel del Hospital Al-Ahli en la ciudad de Gaza, ubicado en la parte norte del bloqueado enclave costero palestino. Lugar donde además de enfermos, heridos y personal sanitario se encontraban, en sus inmediaciones, miles de refugiados expulsados de zonas al norte de la ciudad. Como suele ser habitual, en un inicio, los sionistas han querido culpar a Hamás del hecho, pero las pruebas contundentes mostradas por Al Jazzera que muestran a los aviones israelíes bombardeando el hospital lo desmienten completamente. Un baño de sangre que tiene como responsable directo a Israel y que ha significado una ola de indignación en gran parte de los países árabes y la comunidad internacional, que lanzó a la calle a millones de manifestantes exigiendo castigar al régimen sionista por sus abominables crímenes, con ataques a las embajadas de EE.UU. e Israel en Beirut, Ammán y Bagdad. Asimismo, las airadas protestas tuvieron lugar también en Marruecos, Siria, Qatar, Túnez y Turquía. Igualmente, en varias capitales europeas miles de manifestantes han mostrado su indignación ante esta masacre. Ante ello, el gobierno israelí anunció la evacuación total de sus representaciones diplomáticas en Marruecos y Egipto, ante el riesgo de la toma y destrucción de dichos recintos. Por su parte, el discapacitado físico y mental de Joe Biden estuvo algunas horas en Israel, para mostrar - como era de esperar - su apoyo a los genocidas, sumándose a la falsa narrativa del régimen de Tel Aviv que busca infructuosamente exculparse de esos crímenes. Sin embargo, no solo el video de Al Jazzira los desmiente, sino también un colaborador directo de Benjamín Netanyahu, el denominado portavoz digital de su gobierno, Hananya Naftali, quien en un mensaje en la red X, anunció que la Fuerza Aérea Israelí golpeó “una base terrorista de Hsmás dentro de un hospital en Gaza. Muchos terroristas están muertos. Es desgarrador que Hamás esté lanzando cohetes desde hospitales, mezquitas, escuelas, y usando a los civiles como escudos humanos. Por ello lo bombardeemos”. Ante tamaña confesión y visto el efecto demoledor que esta masacre estaba ocasionando, mostrando al mundo la monstruosa cara de Israel, se apresuro a borrar el mensaje. Entretanto, tanto Washington como sus “aliados” de la OTAN han guardado un mutismo encubridor, convirtiéndose en cómplices de sus crímenes. Si Occidente es capaz de apoyar a regímenes golpistas como el de Ucrania, entregándole cientos de miles de millones de dólares, armas y apoyo logístico, para enfrentarse de modo suicida a Rusia, no es de extrañar que protejan y traten con guante de seda a los genocidas sionistas, ya que son del mismo bando. ¿Dónde están los llamados a establecer un bloqueo aéreo, naval, cercar el espacio aéreo israelí y realizar ataques preventivos para que deje de masacrar a la población civil? ¿Dónde la decisión de establecer un bloqueo comercial contra Israel para que deje de asesinar a la población palestina? La doble moral de Occidente genera vergüenza, impotencia y un dolor infinito frente a los crímenes monstruosos de un ente demoniaco dotado de manga ancha e impunidad para asesinar. Frente a los cohetes lanzados desde suelo palestino, se responde con fuego de artillería, bombardeos aéreos indiscriminados, incursiones militares y controles a todo lo largo de los territorios ocupados. En ese escenario resulta pusilánime, además de irracional tratar de equiparar el poderío sionista con las armas de las milicias palestinas. Es patético que haya quienes pretendan considerar a Israel “como la única democracia de la región” cuando su comportamiento como potencia ocupante y colonizadora revela una conducta exterminadora y criminal, violatoria de los derechos humanos de la población palestina a los que buscan exterminar para “judaizar” los territorios que buscan apropiarse. El derecho de la resistencia contra el invasor es un derecho reconocido y que permite y autoriza la desobediencia civil y el uso de la fuerza. La Declaración Universal de Derechos Humanos del año 1948, consigna en su preámbulo “Considerando esencial que los derechos humanos sean protegidos por un régimen de Derecho, a fin de que el hombre no se vea compelido al supremo recurso de la rebelión contra la tiranía y la opresión” aunque en el caso de Palestina que busca recuperar sus territorios históricos arrebatados por los sionistas sea letra muerta, y cualquier resistencia al invasor lo consideran “terrorismo”; A su vez, los medios de comunicación occidentales en manos de poderosas corporaciones judías, llenan sus páginas, con editoriales, e imágenes con muestras de dolor frente a la muerte de los ocupantes sionistas, pero…¿quién prende velas o se indigna en esos mismos medios de comunicación frente a los asesinatos en masa de los palestinos or parte de Israel? ¿Qué papel cumple la ONU y su Consejo de Seguridad para detener esta barbarie? ¿Qué se ha hecho, en el plano práctico para detener a los criminales de guerra y violadores de los derechos humanos del pueblo palestino? ¿Quién es capaz de detener la masacre, por parte de estos gobiernos, capaces de intervenir con toda la fuerza si se trata de Serbia, Libia, Irak o Yemen?, ¿Quiénes trataron de fragmentar Siria creando a ISIS y sin embargo, frente a los crímenes de los sionistas callan en todos los idiomas? El pueblo palestino tanto en Cisjordania como en la Franja de Gaza soportan diariamente el sufrimiento, la represión, el encarcelamiento, la limpieza étnica y la agresión constante por parte de los ocupantes israelíes alienados en su papel de tropas y sociedad autollamados a ocupar un territorio que no les pertenece, como si de un destino manifiesto se tratase. Una de las falacias más extendidas de la ideología y de la propaganda del sionismo y que de tanto repetirse ha llegado a considerarse que tiene algo de razón para “justificar” la ocupación israelí de los territorios palestinos es la que afirma el derecho de aquellos que se denomina “pueblo judío” al “retorno” a la tierra, de la cual afirman, fueron arrojados hace más de 20 siglos. Para el analista Said Alami “Nada en la Historia documentada y académica rubrica el derecho de los judíos a regresar a ninguna parte y mucho menos a Palestina, tierra donde según la propia Biblia, habían llegado como invasores desde Egipto, entrando en guerra con la población autóctona que ya existía allí” ¿Qué pretende Israel? ¿Que el pueblo palestino siga sojuzgado, que no reaccione frente a décadas de ocupación y desprecio a los derechos humanos de millones de palestinos? Los sionistas no han dejado ni un solo día de humillar, despreciar y reprimir al pueblo palestino, empujando sus acciones hacia la desesperación de una manera calculada y bestial para “justificar” así sus acciones de represalia bárbaras y brutales dadas a conocer al mundo, a través de los medios de comunicación occidentales “como lógicas y razonables” frente al “terrorismo” palestino. Para ello cuenta con la bendición de de Washington y sus “socios” occidentales. El plan israelí de opresión al pueblo palestino está cargado de odio y desprecio al pueblo palestino, como también al desprecio a las leyes internacionales con el objetivo de expulsar a la población palestina en aras de conseguir concretar el Gran Israel y darle cabida así a los millones de judíos que se han ido instalando en suelo palestino “Tu tierra Israel es desde el Éufrates hasta el Nilo”; reza el conocido lema sionista, repetido hasta la saciedad por todos aquellos que son cómplices de una ideología abyecta y criminal, incluyendo gobiernos, medios de desinformación y manipulación, periodistas, líderes de opinión y creyentes evangélicos entre otros. (Precisamente estos últimos son sus más enfervorizados partidarios, porque creen que la reconstrucción del Templo de Herodes - demoliendo previamente el Domo de Roca - traerá como consecuencia la Segunda Venida de Cristo, tal como aparece escrito en el Apocalipsis). Para nadie es un secreto que Israel es una entidad fundamentalista que no está interesada en lograr la paz ni en Palestina ni en Asia Occidental, multiplicando por el contrario su nefasta influencia en diversas regiones del mundo. Suceda lo que suceda en los próximos días en Gaza, Israel no cejara en su empeño de ocupar y colonizar todo el territorio palestino, eliminando a su población para apropiarse por la fuerza de unas tierras que dicen pertenecerles, “porque Dios se los ofreció” ¿Cómo razonar con quienes tienen semejante enajenamiento?
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