TV EN VIVO

sábado, 21 de enero de 2012

OLLANTA HUMALA EN “EL PAÍS”: “No buscaré la Reelección y estoy en contra de la legalización de las Drogas”


Venga, este sábado me di con la sorpresa de encontrar en la edición digital del diario español El País una amplia entrevista que el Presidente Ollanta Humala concedió al director de esa prestigiosa publicación, Juan Luís Cebrián, a su paso por Lima y dada su gran extensión - en la que habla de todo - he decidido publicarlo resumiéndolo en la medida de lo posible ¿vale? : Le bautizaron como Ollanta, “el guerrero que todo lo ve”, y ya en su juventud anidó en él la vocación militar… En el primer encuentro que sostuvimos, antes de celebrar esta entrevista, me sorprendió su timidez, que le hacía parecer huidizo. También el hecho de que, contra lo que suelen hacer los políticos, estuviera dispuesto a escuchar, sin sentir la necesidad imperiosa de colocarme un discurso, de demostrar que todo lo sabe. Yo tenía de él la imagen estereotipada que la mayoría de los medios occidentales y la casi totalidad de los de su país habían difundido: un militar golpista, un Chávez a la peruana que había cambiado la exuberancia caribeña por la severidad del inca, pero que en el fondo constituía la misma amenaza para la democracia que la representada por cualquiera otro de los caudillos latinoamericanos de nuevo cuño. Cuando, contra muchos pronósticos, se situó como el candidato capaz de disputarle a la hija de Fujimori la banda presidencial, la derecha de su país alineó todas las fuerzas frente a este hombre menudo, cuya sobriedad impresiona. Se inventaron contra él procesos judiciales, historias macabras y acusaciones absurdas, algunas tan peregrinas como la de ser propietario de un Rolex que su esposa le había regalado en su aniversario de boda. Pero incluso los más eclécticos analistas europeos no tuvieron empacho en señalar que la elección entre Keiko y Ollanta era algo muy parecido a optar entre la peste y el cólera. Según ellos, la primera respondía al modelo de capitalismo corrupto y sanguinario que el padre había encarnado mientras el comandante era una versión local del castrismo del siglo XXI que acabaría hundiendo al país en la miseria y la represión. Quien primero me ayudó a escapar de este diagnóstico tan sectario y simplista fue Lula, poco tiempo después de abandonar el sillón presidencial brasileño. Así se lo comenté, por cierto, a Mario Vargas Llosa durante el descanso de un partido Madrid-Barcelona en el Bernabéu. Poco después, un artículo del premio Nobel en EL PAÍS contribuía a disipar los temores y la confusión de muchos votantes que, detestando lo que significaba Keiko, no se decidían a apoyar con su sufragio la llegada al poder de un militar de tintes progresistas. La actitud de Mario resultó probablemente decisiva para el resultado final de los comicios. La derecha no se lo ha perdonado, porque Perú se sumaba así a la lista de las repúblicas de América Latina encabezadas por un gobernante de izquierda: “¿De izquierdas? Yo no soy de izquierdas —protesta Humala con rotundidad—. Yo soy un nacionalista que ha recogido las banderas de la justicia social. En realidad, esa división entre izquierda y derecha es algo del pasado … Muchas veces es preciso tomar decisiones que sorprenden a algunos de los que nos apoyaron, pero por lo demás está claro que yo no me identifico con la derecha. A mí me interesa que me juzguen por mis hechos, más que por mis palabras. No doy muchas entrevistas, prácticamente ninguna, quizá porque sufrí durante mucho tiempo la animadversión casi general de los medios”.Cuando pasamos, de las generalidades a los casos concretos, aprecio una leve inseguridad en sus respuestas, quizá fruto de un discurso elaborado con posterioridad al triunfo electoral. Pero suena sincero y parece decidido a poner en práctica lo que dice.: no me negará que por mucho que la diversifique, la minería es un factor esencial en el desarrollo peruano que está generando mucha controversia. Usted enfrenta ahora un contencioso con las autoridades locales de Cajamarca que ha provocado incluso la caída del primer ministro.:” El cambio de gabinete se debió a la necesidad de mejorar el ensamble del mismo, estableciendo una sola línea política que sea seguida por todos los ministros. Es el presidente el que tiene la responsabilidad de marcar esa línea, porque lo ha elegido el pueblo. En cuanto a lo de Cajamarca, se inscribe en una serie de conflictos que son herencia del pasado. Se da la circunstancia de que Cajamarca es una zona que aporta mucho al desarrollo minero y sin embargo es de las regiones más pobres del país. Por eso las dudas que exhiben las comunidades son legítimas, y el Estado debe resolverlas, pero también es una prioridad defender el Estado de derecho”.En medio de esa política de impulso a la agricultura, ¿qué hacer con los cultivos masivos de hoja de coca? ¿Qué le parecen los reclamos de ex -presidentes de varios países para legalizarla o despenalizarla?: “Yo estoy en contra de la legalización de las drogas. A las drogas hay que combatirlas mediante la interdicción y la investigación en el lavado de activos y dinero”. Asimismo expresó su rechazo a la utilización del ejército en la lucha contra el narcotráfico. ¿Y a una futura reelección? Usted es muy joven…”No es un tema en la agenda” puntualizo, finalizando su entrevista hablando sobre su inminente viaje a Europa para participar en la Conferencia de Davos (Suiza) así como la importancia de las relaciones con España, su socio más importante en el Unión Europea y al cual también visitará en su gira. Como ven, fue una amplia entrevista dada en exclusiva a ese prestigioso medio, el cual pueden leerla completa en el siguiente enlace (mi opinión al respecto de esas declaraciones, me lo guardo por hoy): http://internacional.elpais.com/internacional/2012/01/21/actualidad/1327168389_228019.html

Creative Commons License
Esta obra está bajo una Licencia de Creative Commons.